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Malos tiempos para la libertad

La diversión en los recién estrenados campamentos infantiles tiene que adaptarse a las restricciones sanitarias

Campamento urbano de A Estrada, en Figueiroa. // Bernabé/Javier Lalín

Por su edad, son más libres que nunca. Por mucho que sus padres los tengan bajo cuerda para que no se desvíen del camino, su desbordante imaginación, sus ganas de disfrutar de la vida y su inocencia los mantienen a salvo de las muchas ataduras de la vida adulta. Sin embargo, este es un verano atípico. Son malos tiempos para la libertad. La diversión tiene límites infranqueables que privan a los más pequeños de algo esencial: el contacto y la proximidad con sus iguales. No obstante, los concellos de la zona han hecho un esfuerzo para adaptarse a las restricciones sanitarias y, adoptando todas las medidas de seguridad, poner en marcha programas pensados para la diversión de los más pequeños de la casa.

El Concello de A Estrada activó ayer sus cuatro propuestas de conciliación. El alcalde, José López Campos, explicó que todas las solicitudes de participación fueron atendidas, tanto en el ámbito urbano como en el rural. De este modo, el Campus Deportivo de Verán arrancó con las 70 plazas ofertadas para esta primera quincena de julio cubiertas, reservando también las de la segunda. En el campamento urbano -que este año desarrolla entre los pabellones de Pérez Viondi y Figueiroa- se atendieron 46 solicitudes (de inicio se ofertaban 40 plazas) y en el Espazo Concilia se registraron 23 demandas de plaza para este mes.

El Concilia Rural tiene 67 niños este mes, distribuidos entre sus cuatro localizaciones. López aseguró que el Concello está trabajando para cubrir la demanda de agosto y avanzó que una de las novedades de este año -además del uso de mascarilla, hidroalcohol, distancia de seguridad y juegos adaptados- es que se alargarán los campamentos del Concello hasta el mes de septiembre, dada la incertidumbre existente. "Hay que seguir apoyando a las familias por si el curso empieza con retraso o con una incorporación paulatina", apuntó.

Silleda también puso ayer en marcha su Campamento de Verán del Servizo Lúdico Educativo municipal, con grupos en Silleda y A Bandeira, cada uno con un máximo de 15 asistentes. Todavía quedan plazas libres.

También Enrédate activó sus campamentos, en este caso en Lalín, con 280 plazas ofertadas entre julio y agosto, repartidas entre su propio centro, el campamento de Vilatuxe y el CEIP Golmar. Las actividades se extienden de 07.30 a 21.00 horas. De igual modo, Enrédate activa campamentos multiaventura en diversos concellos gallegos. En Deza está previsto la última semana de este mes.

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