Un total de 82 empresas fueron dadas de alta en los nueve municipios de Deza y Tabeirós-Montes durante el año pasado. Este dato representa un descenso de 10 firmas respecto a las constituidas doce meses antes. Así se deduce del balance hecho público ayer por el Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme), según el que podemos concluir que Lalín concentra cuatro de cada diez entidades activadas en el año que acabamos de despedir, o lo que es lo mismo, 34 de las 82 totales.
En la capital dezana se fraguó la puesta en marcha de un total de 34 nuevas sociedades mercantiles, lo que supone un incremento de siete respecto a las habidas un año antes. Junio, con seis altas, fue el mes más propicio para el emprendimiento empresarial. Silleda, donde en 2018 se había formalizado la creación de 19 empresas, ahora el registro cae a 14. En Vila de Cruces la diferencia, aunque a la baja, es menos acusada al cerrar el pasado curso con cinco altas frente a las seis del período anterior. Agolada mantiene los mismos números y en doce meses fueron dos las firmas dadas de alta, mientras que en Dozón también son dos, una más en un año. Rodeiro, con dos altas en 2018, cerró el pasado ejercicio con solo una. La principal reducción se concentra en A Estrada, municipio en el que se activaron un total de 18 sociedades mercantiles, cuando en 2019 habían sido exactamente 26. En Forcarei fueron dos, una más, y Cerdedo-Cotobade se quedó en cuatro, cuando en el período anterior habían sido siete.
En otro orden de cosas, en lo que respecta a los datos de la comunidad autónoma, el pasado ejercicio se cerró con un balance positivo de 2.291 sociedades, ya que fueron creadas 3.729 por las 1.501 disueltas. La Xunta concreta, además, que 1.258 empresas gallegas ampliaron capital durante el año pasado. Por provincias, en A Coruña se dieron de alta 1.613 firmas, en Pontevedra fueron 1.465 y 366 y 348 respectivamente en Ourense y Lugo.
