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Pablo Fraiz: "Con estas pruebas podemos demostrar que los militares tenemos un buen nivel"

"Estar en Afganistán me sirvió para darme cuenta de la satisfacción de poder ayudar"

Pablo Fraiz, segundo de arriba por la derecha, con la medalla de plata en a prueba de Gales.

El vecino estradense de 31 años Pablo Fraiz ha participado en una prueba de resistencia junto con su equipo de militares. El sargento actualmente está destinado en la Tercera Batería del Grupo de Artillería Número Siete de la Brilat, en Figuerido, Pontevedra. Fraiz ha estado en Gales, donde se ha sometido a una competición en la que, con 45 kilogramos de peso, debían recorrer unos 60 kilómetros por los montes, superando ciertas pruebas como el trato de personal capturado, paso de campo de minas, primeros auxilios y evacuación médica o la adquisición de objetivos de artillería y corrección de tiro. Una competición en la que se exigía una extraordinaria fortaleza, tanto física como mental, que el equipo español ha demostrado tener tras conseguir la plata. Es una de las pruebas más importante.

-¿En qué consistía la prueba en la que ha participado junto con su equipo?

-Es una prueba que se organiza en Gales bajo el título de Cambrian Patrol. Consiste en una simulación de una misión en el Parque Nacional British Mountain. Es una caminata entre dos puntos en las que hay que superar las tareas que te puedes encontrar como soldado en cualquier operación real. Mi equipo, Grupo de Artillería de Campaña Número VII. Brigada Galicia VII, está formado por diez personas, pero dos siempre quedan de reserva. De los ocho componentes que participamos en la prueba, uno era de Madrid, otro de Victoria y el resto gallegos.

-¿Qué supone obtener una plata en estas competiciones?

-Ganar o quedar segundo en este tipo de pruebas que se celebran en el extranjero, como el caso de Inglaterra pues demuestra que, tanto las Fuerzas Españolas, como el Grupo de Artillería en específico, estamos a un buen nivel en comparación con el resto de países del mundo.

-¿Cuándo empezó su vocación?

-En unos días hará diez años que estoy en el ejército. Cuando decidí meterme en esto, tenía 21 años y me gustaban las profesiones que fueran encaminadas a poder ayudar a la gente. Primero lo intenté con Policía Nacional, pero no conseguí aprobar las oposiciones porque no me apliqué, entonces decidí meterme en el ejército.

-¿Fueron más fáciles las pruebas para entrar?

-Son asequibles, es cierto. Las pruebas las hay que pasar de forma anual para demostrar una condición física aceptable, requerida para estar en el ejército. Pasarlas es muy fácil, el reto está en superarse personalmente y sacar nota, eso es más complicado. La verdad es que fue lo mejor, porque estoy muy contento con mi trabajo, que es lo más importante.

-¿Tuvo la oportunidad de estar en una misión fuera de España?

-Sí, entre los años 2012 y 2013 estuve en Afganistán. Mi labor allí era hacer guardias en el acuartelamiento donde estábamos, después hacer de escoltas a algunas autoridades fuera del cuartel, con eso implicaba ir ayudar en los colegios a repartir ropa, a la colocación de calefacción, tanto con ingenieros civiles que están trabajando allí como ir a ver obras que se podrían hacer para mejorar en infraestructuras.

-¿Cómo valora la experiencia?

-Fueron unos seis meses, que es el período máximo para las misiones. Al principio, pues estar lejos de la familia costó un poco, pero luego me pasó rápido. Me acostumbré bien a la rutina del día a día allí y el tiempo se me hizo corto, porque ayudando a otras personas te sientes mejor. Mi experiencia fue buena, muy positiva. Me sirvió para darme cuenta que me gustaba más este trabajo, porque vi que servía para ayudar a la gente. Aunque nuestra función era darle seguridad a otras entidades, ayudábamos a la civilización de donde estábamos, que era lo más satisfactorio.

-Fue una misión social...

-Son las misiones que se están haciendo ahora mismo. Los militares tenemos dos tipos de objetivos misiones de paz y mantenimiento, es decir, de ayuda humanitaria, o la defensa de nuestro país en caso de ser amenazado por alguna fuerza externa, pero ahora mismo no existen este tipo de misiones.

-¿Tiene previsto volver salir al extranjero?

-No depende de mí. Me gustaría muchísimo poder salir a otra misión internacional, pero depende del jefe que me considere óptimo para poder salir.

-Además de ser militar, también juega al fútbol gaélico, ¿es fácil c compaginarlo?

-Estoy en la Selección Galega de Fútbol Gaélico. La selección no tiene ningún tipo de salida este año, la próxima va a ser en Pontevedra el próximo año. Esperemos que el seleccionador pueda contar conmigo para poder participar, me gustaría. Es compaginable con mi vida como militar, porque no exige mucho. Todos somos aficionados y nos gusta jugar, por lo que todos tenemos que compatibilizarlo con nuestros respectivos trabajos.

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