El BNG de A Estrada denunció ayer que la Xunta de Galicia como titular de la carretera PO-214 -que comunica la parroquia estradense de Baloira con el vecino municipio de Pontecesures- está instalando vallas quitamiedos a lo largo de todo el trazado. La denuncia nacionalista surge porque, a juicio del edil del BNG de A Estrada, Xosé Magariños, "este modo de trabajar es una chapuza". Para justificarlo, esgrime "dos motivos". "En primer lugar", apunta el portavoz nacionalista, "no tiene sentido colocar vallas quitamiedos sin antes eliminar los enormes eucaliptos que hay en las márgenes de esta carretera, especialmente en O Alto do Chedón. De ahí que el Bloque inste al alcalde a actuar para demandar de la Xunta una mejora del sinuoso trazado. En concreto, Magariños le pide al máximo mandatario local de A Estrada que "se mueva" para lograrlo, actuando sobre varios puntos más que mejorables.

Cruce de Baloira y arcenes

Antes de nada, propone iniciar dicha mejora por el "peligroso cruce de Baloira", a fin de garantizar la máxima seguridad vial en la zona. También demanda una nueva capa de rodadura y la creación de arcenes para garantizar la seguridad de los usuarios del tramo. "En definitiva", resume Xosé Magariños, los nacionalistas quieren tener una carretera autonómica PO-214 "del siglo XXI" en lugar "de una corredoira por la que pasan a diario cientos de vehículos y camiones".

Entiende que "teniendo en cuenta que esta carretera es la única comunicación que tiene A Estrada con la autovía del Barbanza, sería oportuno que el gobierno municipal del PP hiciera las gestiones oportunas" para tener "unas comunicaciones a la altura de nuestras necesidades".

A mayores, también demanda que el ejecutivo liderado por José López le pida a la Xunta que "coloque unas vallas menos agresivas con los motoristas" y que, asimismo, "eliminen los eucaliptos".Estos, a su juicio, constituyen "un peligro por la cantidad de ramas que tiran a la carretera durante los temporales, un hecho que ya hemos denunciado hace ya más de un año". Recuerda que la propia Xunta estudió en 2014 la eliminación de esos árboles, que "a día de hoy ahí siguen, cuatro años después, causando problemas" a los vecinos de Santa Mariña que tienen que utilizar a diario" esa calzada.

En cuanto a los quitamiedos, hace notar que "todas las vallas que colocó la Xunta de Galicia -y fueron muchos kilómetros- no tienen la debida protección para motoristas". En su opinión, "a día de hoy, todas las carreteras deberían contemplar estas protecciones para evitar graves lesiones a las personas que utilicen este tipo de vehículos, especialmente en una carretera llena de curvas como es la PO-214 que une Baloira y Pontecesures".