Si del viaje se alimentan las mentes, el IES Ramón Mª Aller Ulloa de Lalín lo ha sabido poner en práctica. Un total de 18 alumnos del último año de instituto llegan desde Zielona Gora, una ciudad al oeste de Polonia y próxima a la frontera alemana para aterrizar en territorio lalinense. En los próximos cuatro días de su estadía aquí, será na garantía empaparse de la cultura gallega y lalinense.

El centro escolar, radicado en la calle del Parque, fue el escenario elegido para dar la bienvenida, en la mañana de ayer, al grupo polaco en compañía de sus huéspedes lalinenses. Para la recepción se citaron la vicedirectora del centro, Almudena Mosquera, la profesora Ana Reboiro junto con los sus dos análogos del centro polaco, una profesora de lengua española y un docente de física. Así pues, los recién llegados puideron visitar el interior del instituto, dando a conocer sus aulas más preciadas: la biblioteca y el laboratorio. Acto seguido, los estudiantes polacos mostraron una exposición, a modo de presentación de su cultura, para animar a los alunmos de 1º de Bachiller a vivir esta misma experiencia el año próximo.

De hecho, esta es ya la segunda experiencia de este tipo de intercambio estudiantil, como puente de unión entre Lalín y Polonia. Fue por intermediación de la docente Reboiro la que primero determinó lavisita de los estudiantes lalinenses a la ciudad polaca, en el mes de abril, y ahora el recibimiento de sus análogos polacos. "Los alumnos polacos saben muy poco español así que la única forma que tienen de comunicarse con los nuestros es a través del inglés", subraya Mosquera. Un hecho que da cuenta de la riqueza lingüística, más allá de la cultural, que caracteriza a este tipo de intercambios. A ello se le une la posibilidad de entablar contactos a largo plazo. "Mi familia polaca me ha recibido muy bien e incluso me han propuesto volver a su casa por vacaciones", comenta un alumno del centro lalinense, Gustavo Thomé. Precisamente Gustavo acoge en su casa, junto a su familia, a Szymon Gadomski, quien concuerda en señalar que "la comida de aquí es fantástica, sobre todo, la tortillay el chorizo".

A este respecto, tanto el grupo de alumando de Lalín como el polaco llevan ya avanzados grandes pasos en el terreno de la integración. Mientras los primeros han ya conocido el territorio polaco y en concreto, la ciudad de dónde vienen el grupo Zielona Gora, ahora a los segundos les toca no solo conocer Lalín, sino también la capital compostelana, Ourense y A Coruña. Todo ello bañado de la filosofía en la que coinciden el profesorado del Ramón Aller: "Las familias deben acoger de la misma buena forma que los polacos han recibido a nuestros alumnos", apunta Mosquera.

Así pues, al desayuno de bienvenida en el salón de actos del citado instituto, devino una sesión de relajación con la práctica del yoga impartida por el profesor de Educación Física, Javier Montoto. Posteriormente, polacos y lalinenses se citaron en el consistorio para conocer sus instalaciones en una visita guiada íntegra en inglés. A esta cita, le seguiría una merienda en la Carballeira do Rodo.

Hoy, en cambio, el alumnado saldrá a primera hora de la mañana del centro escolar rumbo Santiago de Compostela. En la capital les espera una nueva visita guiada, nuevamente en inglés, para conocer los puntos emblemáticos del casco histórico de la ciudad, entre los que no cabría faltar, la catedral. El grupo polaco en compañía de sus huéspedes lalinenses completarán la gira de excursiones en Ourense mañana y A Coruña pasado para finalmente tener que despedirse en la mañana del lunes, 15. Un adiós que, con todo, no se espera sea definitivo.