El estudio Galiat que investiga los efectos de una intervención comunitaria con dieta tradicional atlántica recibió en la jornada de ayer el primer Premio Sedap-Ferrer, un galardón que organiza la sociedad española de directivos de Atención Primaria, en una jornada que se celebró en Pontevedra y que sirvió para destacar las experiencias innovadoras en centros de salud de Galicia.

El equipo investigador del ensayo está integrado por profesionales de la gerencia de Gestión Integrada de Santiago: María del Mar Calvo, del servicio de análisis clínico, Juan Sánchez, jefe de servicio del CS de A Estrada, Rosaura Leis, Coordinadora de la Unidad de Gastroenteroloxía, Hepatoloxía y Nutrición Pediátrica, Francisco Gude, Epidemiólogo, y Alfonso Benítez, jefe del servicio de análisis clínico.

El trabajo de campo, incluyendo el reclutamiento y seguimiento de las familias participantes (250 familias), se realizó desde el centro de atención primaria de A Estrada. Más de ochenta profesionales del centro de salud actuaron como investigadores colaboradores. Todas las personas involucradas recibieron formación teórica y práctica sobre los procedimientos normalizados del trabajo del estudio.

El proyecto Galiat propone un cambio de paradigma para prevenir la obesidad y enfermedades asociadas, con un enfoque comunitario que involucre a la familia, basado en una dieta congruente con el patrimonio cultural y gastronómico de la zona, ofreciendo educación nutricional individual y comunitaria y educación gastronómica, todo realizado desde el marco de la atención primaria.

El objetivo de este ensayo clínico fue a generar una acción para mejorar los hábitos alimentarios de la comunidad y como consecuencia, su bienestar. El estudio trata de generar conocimiento para, a través del plan de salud local, trasladar el conocimiento obtenido en la investigación a la acción y el cambio en positivo de los hábitos alimentarios.

El desarrollo del estudio Galiat dentro del marco del Plan de Salud y del proyecto global Galiat 6+7, animó a la interacción entre los servicios sanitarios y comunitarios. Los resultados y las conclusión fueron trasladados a la comunidad científica y a la sociedad.

Las conclusiones indican que, tras quince meses de intervención en 720 individuos de 250 familias, en las que se obtuvo un desplazamiento de alimentos hacia patrones más saludables, se redujeron los niveles de colesterol y de colesterol LDL y que la mayor merma se registró en mujeres y niños. También hubo una significativa merma del peso.

En el proyecto se implicaron seis empresas y siete grupos científicos. Las firmas eran Bodegas Terras Gauda, Pazo de Rivas, Olei Aceite Gallego, A Rosaleira, Friscos y Quesquem. Y los siete grupos científicos eran el Grupo de Viticultura y Grupo de Brásicas de la Misión Biológica de Galicia-CSIC, el Grupo de Química de Productos Marinos del Instituto de Investigación de Ciencias Marinas-CSIC, el Complexo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS) y la Fundación Ramón Domínguez, el Aula de Productos Lácteos de la Universidade de Santiago de Compostela (USC), el Departamento de Farmacología de la Facultad de Medicina de la USC y el Departamento de Química Analítica y Alimentaria de la Universidade de Vigo.

Las 250 familias de A Estrada seleccionadas se integraron en el grupo de intervención o en el de control. Se les proporcionaron alimentos proporcionados por las empresas participantes en el consorcio para que los fuesen incorporando a su dieta: mejillones de las rías, grelos y berzas, queso cremoso desnatado, aceite de oliva producido en Galicia y vinos Albariño y Mencía, a fin de comprobar la eficacia biosaludable de la dieta tradicional.