La admisión de un recurso contra la aprobación del plan urbanístico de A Trigueiriza por parte del Tribunal Supremo coloca de nuevo al Concello de Lalín en medio de dos frentes: la parte recurrente y los propietarios de los terrenos. El concejal de Urbanismo, Nicolás González Casares, señala que la judicialización de este proceso por las demandas cruzadas provocará que el desarrollo urbanístico de estos terrenos vaya a eternizarse y por eso avanza que desde el Concello no se darán más pasos hasta que una resolución judicial otorgue la razón a la parte demandante o a los vecinos que impulsaron el desarrollo de esta zona periurbana que abarca unas cuatro hectáreas de superficie.
Casares dice que como miembro del ejecutivo local no valorará la sentencia del Supremo, dictada el pasado día 7 de este mes. En todo caso sí apunta que en cierta medida el fallo podría esperarse pues así lo habían advertido los técnicos del área de Urbanismo y los servicios jurídicos municipales. El edil insiste en que el grupo de gobierno tomó "este problema heredado" y trató de actuar siempre con "prudencia" y en la defensa de los intereses del ayuntamiento. En este sentido recuerda que esta cautela motivó que solamente se diese el visto bueno, tras mucho tiempo de espera por parte de los promotores del plan de A Trigueiriza, al proyecto de compensación. "Lo que parece evidente es que este asunto va para largo, que desde el Concello actuamos con discreción en un tema urbanístico delicado, y que ahora no se tomarán decisiones hasta que haya una resolución judicial definitiva", manifiesta.
En relación al visto bueno al plan de compensación, González Casares recalca que su aprobación era necesaria, pero que a su vez no supone un contratiempo para ninguna de las dos partes en términos judiciales. Es decir, aduce que solamente se establece cómo quedarían las propiedades de cada uno de los dueños de esta zona situada entre Carragoso y García Sánchez, con el desarrollo urbanístico de la misma. "Precisamente por esa cautela no hay ningún problema lesivo para los intereses de ningún particular, que sí habría en caso de que se aprobase el proyecto de urbanización". Casares se refiere a que con el proceso en cierta medida ultimado algunos propietarios podrían iniciar trámites de registro ante notario, traspasos de bienes o incluso previsión de obras que actualmente solo con el plan de compensación no son posibles.
"Estamos hablando de grandes complejidades, aunque en ningún momento la parte recurrente solicitó al concello la paralización o suspensión del proceso. Lo que corresponde ahora, nos dicen los asesores técnicos y jurídicos, es esperar".
En relación si la cadena de alimentación Mercadona mantendría su interés por asentarse en esta zona en función de un acuerdo con los promotores del plan de A Trigueiriza, el edil dijo que a quién compete pronunciarse es a la empresa. "Hablaron con nosotros muchas veces, pero ahora ya hace al menos tres meses que no", concluye el responsable municipal de Urbanismo.
