José Balseiros era ayer un alcalde más ocupado de lo habitual. Comunicar la decisión de que Cerdedo y Cotobade formarán un único concello le hizo reunirse primero con el presidente de la Xunta, después con los representantes de la oposición y más tarde con los vecinos. Defiende las ventajas de un proceso que cobrará forma este año pero que florecerá en 2019.
-Han causado un auténtico revuelo.
-Llevamos tiempo con este tema, negociando, debatiendo y analizando datos de población, económicos? un montón de cosas.
--¿Hay algún motivo para que esta fusión se haya conocido de un modo tan sorpresivo?
-Sí, claro, hay uno evidente: otras fusiones se fueron al garete porque se filtraron las negociaciones. Cualquier tipo de filtración interrumpiría o paralizaría esas reuniones y negociaciones.
-La pregunta que se hacen en estos momentos los cerdedenses es cómo les afectará a ellos, al ciudadano de a pie, este nuevo escenario.
-Les afectará de forma sumamente positiva en todos los aspectos. Primero, nosotros en estos momentos tenemos 1.800 habitantes y no había garantía alguna de que dentro de cuatro o cinco años, con los ingresos que tenemos del Estado y de la Xunta por los habitantes, pudiésemos tener la oportunidad de seguir prestando los servicios que prestamos a nuestros vecinos. Por otra parte, sería casi imposible hacer nuevas inversiones, nuevas infraestructuras y prestar nuevos servicios. Sin embargo, con esta unión de concellos por el procedimiento de fusión voluntaria -con las prerrogativas que tiene reguladas por ley tanto del Estado como de la Xunta de Galicia- va a suponer una mejora y una solvencia técnica y económica que va a permitir que sigamos prestando todos los servicios, que sigan abiertos y funcionando todos los edificios oficiales e institucionales que tenemos en el concello y, además, que podamos seguir atendiendo todas las necesidades y peticiones que nos hacen cada día los vecinos.
-¿Quiere decir que, en la práctica, se mantendrán abiertos el consistorio, el colegio o los pabellones, por ejemplo?
-Lo que primero se negoció fue mantener abiertas las dos casas consistoriales para la atención de proximidad a los vecinos, del mismo modo que se viene haciendo hasta el momento. El segundo punto que se puso sobre la mesa fue mantener los puestos de trabajo del personal laboral y funcionarios para los mismos efectos, para atender como se merecen los vecinos; la tercera cosa que se negoció y se acordó fue que la fusión tiene que significar claras ventajas y mejoras para los ciudadanos y nunca ningún retroceso ni ninguna merma en los servicios. Eso quiere decir que no solamente vamos a seguir teniendo abiertos el colegio, el centro de día, el hogar residencial, la guardería, el centro cultural, el PAC de urgencias 24 horas? sino que, incluso, con las prebendas económicas que tenemos como consecuencia de esta fusión voluntaria vamos a hacer nuevas infraestructuras y a crear nuevos servicios e, incluso, llegar a la rebaja en algunas de las tasas e impuestos que estamos aplicando en estos momentos. Y, por encima de todo, la garantía de que a largo plazo va a pervivir la administración local en el territorio que hasta ahora formaban estos dos concellos. Por tanto, para los vecinos no va tener cambios en negativo, sí en positivo, con la total garantía de servicio público.
-Entonces, ¿todos los trámites que los vecinos tendrían que hacer ante una administración municipal los seguirán haciendo aquí, en Cerdedo?
-Sí. Todos los vecinos de cualquier lugar de Cerdedo los seguirán haciendo aquí, como hasta ahora, en el concello. Y todos los de Cotobade, en su concello.
-Cuando un alcalde toma una decisión como esta, además de ser meditada, quizás denote cierto temor por el futuro de su concello. ¿Cómo veía usted del mañana de Cerdedo?
-Está muy meditada. Llevamos cerca de dos años hablando y estudiando cada dato. Sobre el futuro de Cerdedo, está muy claro: hace cuatro años teníamos 2.350 habitantes, hoy tenemos 1.800. Más de un 50% de la población es mayor de 75 años y un 18% es mayor de 85. Con este ritmo en cuatro o cinco años bajaríamos de los 1.000 habitantes. Si eso se produjese, volveríamos a bajar de categoría y los ingresos que recibiríamos del Estado y la Xunta serían del todo insuficientes para seguir prestando los servicios que hasta ahora prestamos. Por tanto, podríamos incurrir en quiebra técnica, en inviabilidad financiera, habría que hacer un ERE, despedir a la mayor parte del personal y suprimir servicios.
-¿Cuándo serán Cerdedo y Cotobade un único concello?
-La culminación del procedimiento de la decisión de fusionarse puede estar a lo largo de este año, en el verano o a principios de invierno. Una vez aprobado, todos los concejales de las dos corporaciones funcionarán como una sola, que se llamará junta gestora, y funcionará todo como hasta ahora hasta las próximas elecciones municipales de 2019 en las que sí habrá, como consecuencia de los resultados, una única corporación en lugar de dos y en lugar de 20 concejales habrá 13.
-¿Seguirá siendo usted el alcalde de Cerdedo?
-Sí, hasta que haya elecciones seguirá el alcalde y los concejales de Cerdedo y el alcalde y los concejales de Cotobade ejerciendo sus funciones. Después presentaremos una lista única en la que de momento no se tiene acordado nada porque faltan tres años y medio y, tal y como está habiendo movimientos políticos en nuestro país, tomar ahora una decisión en este sentido sería algo muy aleatorio y poco serio.
-¿Qué nombre tendrá el concello resultante de esta fusión?
-Nuestra propuesta, que someteremos a exposición e información de los vecinos, es que para que no se pierda nada, ni siquiera ninguna identidad local, ni costumbres ni usos ni tradiciones, es que inicialmente se llame Concello de Cerdedo-Cotobade.
-¿Seguiría integrado dentro de la comarca de Tabeirós-Terra de Montes?
-Eso se verá dentro de la tramitación del expediente. No depende solamente de nosotros. Habrá que verlo con el Ministerio del Interior.
-¿Y cómo afectará en lo tocante el partido judicial?
-Pues de momento no afecta, que sepamos.
