Diferenciarse es una de las cuestiones a las que está obligada el sector hostelero para sobrevivir. Entender que el apostar por buenos profesionales es una inversión y no un gasto podría ser una de las decisiones más acertadas dentro del mundo empresarial. Eso es algo que tienen muy claro en la academia Turhostel, dirigida por Francisco Táboas y que cuenta con una delegación en Meaño.
"Por fortuna, las empresas empiezan a valorar los conocimientos y la formación, por encima del volumen de horas de trabajo. Ese es el camino para que cualquier negocio pueda sobrevivir: la calidad", afirma un Táboas que será el director de los cursos para camareros y cocineros que comenzarán a impartirse a partir del lunes en Cambados.
La cuota, para cada una de las dos especialidades, es de 100 euros y la inscripción todavía permanece abierta en el número de teléfono 689 83 14 00. Además habrá una rebaja en el precio para desempleados, menores de edad y estudiantes. Por delante 100 horas de formación repartidas en tres meses con clases tres días a la semana.
El sentido de la formación es eminentemente práctico y encaminado a un rendimiento inmediato en el campo laboral. Táboas apunta a este respecto que "nunca funciona en este tipo de cursos saturar a los alumnos con la parte teórica. Deben conocer y saber hacer. Desde cuales son las conductas a desarrollar en cada cargo o incluso cuestiones de uniformidad, trato con el cliente y presentación del producto".
De la necesidad de una mayor preparación en el sector, Táboas no tiene ninguna duda. Pone para ello un ejemplo, "en Galicia no tenemos ni un solo restaurante con dos estrellas Michelín. Y eso no es porque falte calidad en la materia prima, sino por aspectos relacionados con la inversión en los profesionales que están a su cargo".
La presencia en el País Vasco de la Basque Culinary Center es el ejemplo a seguir, pues "equivale a un título universitario la formación allí. Por eso es la zona más rica en cuanto a la hostelería en el más amplio sentido de la palabra. Tienen muy claro que para sobrevivir hay que apostar por los que están formados porque eso es algo que el cliente sabe valorar y agradecer".
Los cursos contarán además con clases maestras a cargo de destacados profesionales, "se trata de conocer de verdad la labor a desempeñar y disfrutar de ella a partir del aprendizaje y el conocimiento. Todo ello redundará, no solo en el propio negocio, sino también en el propio trabajador que verá más valorada su labor", explica.
