Un hostal de O Grove situado en pleno centro urbano de la localidad sufrió el viernes un extraño robo. Al parecer, según confirman los propietarios, alguien accedió al interior del edificio y penetró en una de las habitaciones, que en ese momento permanecían vacías.

Una vez allí, el autor o autores del robo se encargaron de arrancar el televisor que estaba anclado a la pared y se dieron a la fuga, llevándose tanto el aparato, de 24 pulgadas, como el soporte sobre el que se sostenía.

La propietaria del establecimiento había entrado a la habitación a las 16,30 horas para cerrar las ventanas y todo estaba en orden. Regresó al filo de las ocho de la tarde para bajar las persianas, dándose cuenta en ese instante de que el televisor había desaparecido.

Esto quiere decir que el robo se produjo a plena luz del día y que los cacos tuvieron que salir con el televisor bajo el brazo por calles como Luis Seoane, de ahí que inmediatamente se alertara de lo sucedido en las redes sociales, para averiguar si alguien había visto algo.