El Bloque Nacionalista Galego lleva una vez más al Parlamento la situación de la represa o azud existente en el río Umia, a la altura de Cabanelas. Los nacionalistas se quejan de que este obstáculo, hecho sobre todo con piedras, afecta al discurrir normal del agua del río y que podría llegar a causar inundaciones en la parroquia cambadesa de Oubiña en caso de lluvias intensas.

El azud fue construido en su día por propietarios de la isla de A Toxa. Los inmuebles de la isla no toman el agua de la captación general de O Salnés, sino que tienen una propia. Pero su punto de captación está entre Ponte Arnelas y Cabanelas, y hay determinados momentos del año en que las mareas son tan intensas que propician que llegue agua salada del mar a la captación. El objetivo del azud es impedir el paso de esa agua salada.

Pero el BNG solicita que se busquen alternativas para A Toxa, sin necesidad de mantener la represa. Los nacionalistas recuerdan que la isla podría conectarse a la red general (O Grove tiene una tubería propia), y que hay quejas de vecinos y deportistas por los efectos del "atranco" de piedras sobre el nivel del mar. Además, recuerdan que eso afecta negativamente al ecosistema fluvial.

Además, los nacionalistas reprochan a la Xunta que en 2016 ya se aprobó en el Parlamento buscar una alternativa a la represa.