Aunque la vendimia ya ha empezado en la Denominación de Orixe Rías Baixas, y ya han entrado en bodega más de un millón de kilos de uva, el inicio está siendo muy escalonado. El tiempo seco y soleado de las últimas semanas, y la previsión de que siga así al menos unos días más, tranquiliza a los viticultores y bodegueros. En cualquier caso, será probablemente a partir de este fin de semana cuando ya se produzcan las primeras jornadas de vendimia intensas.
Muchos viticultores cuentan con amigos y familiares para trabajar en sus parcelas, y el hecho de que estos tengan también ocupaciones laborales, propicia que sea en fin de semana cuando la mayoría de productores concentran sus labores de recolección de la uva.
En lo que atañe a las grandes bodegas, las más madrugadoras son las que elaboran vinos espumosos, para los cuales es necesario que el fruto esté todavía un poco verde, o las que prefieren obtener caldos con menor graduación alcohólica. En un momento en el que la uva ya está madura, cada día que pasa, el fruto puede ganar algo de azúcares, y la tendencia actual de una gran parte del mercado de los vinos pasa por ofrecer caldos más frescos y con menor graduación, de ahí que haya bodegas que adelantan la cosecha de forma premeditada.
Previsiones de Meteogalicia
La de este año está siendo una vendimia muy tranquila gracias a las condiciones meteorológicas. La falta de lluvias de las últimas semanas, y la expectativa de que no llueva en abundancia en los próximos días, ha hecho que muchos hayan tomado con calma la organización de la recolección. Es más, algunos agricultores aún confían en que llueva ligeramente algún día, pues eso redundaría en un mayor peso y calidad de la uva.
El servicio meteorológico de la Xunta de Galicia apunta para los próximos días que los cielos seguirán secos y soleados. Sí podría producirse un cambio a partir del domingo, ya que cabe la posibilidad de que se registren algunos chubascos. Eso sí, Meteogalicia aclara que serán más probables en el interior de la comunidad.
Otra de las características de la presente campaña es que la maduración de la uva está siendo muy heterogénea debido a las condiciones meteorológicas de junio y julio, marcadas por los días frescos, la elevada humedad e incluso la lluvia. Así lo afirma por ejemplo Guillermo Hermo, administrador del pazo de Rubiáns, en Vilagarcía, cuyo vino ganó en 2017 el primer premio en la Festa do Albariño de Cambados.
En el caso del pazo de Rubiáns, prevén iniciar la vendimia mañana viernes, pero aún de forma escalonada, para poner a andar correctamente todos los procedimientos. La intención de esta finca es que el grueso de los trabajos de recolección arranque a partir del lunes.
En julio, los técnicos de Rías Baixas y del sector llegaron a barajar incluso la posibilidad de que la cosecha se iniciase en algunos puntos a finales de agosto, por el estado de maduración que tenía en esos momentos la vid.
De hecho, algunas bodegas instaron a sus productores a aplicar a principios de agosto los últimos tratamientos fitosanitarios, para cumplir de ese modo con los plazos de seguridad.
No obstante, esas previsiones se desbarataron completamente durante la primera quincena de agosto, donde los días calurosos y con sol se contaron con los dedos de las manos.
En lo que sí coinciden los productores es que la uva que se está obteniendo estos días está sana y es de calidad.
