Si hay un ejemplo de meteórica progresión profesional ese bien puede ser el personificado por Manuel García Giráldez. Su exigente formación, no exenta de innegables cualidades, le han abierto las puertas de la banca más prestigiosa del mundo. La sede del UBS en Zúrich se ha convertido en su lugar de trabajo. Allí reside hace casi cinco años. Atrás, aunque todavía recientes debido a su juventud, han quedado sus años de formación en el colegio Filipenses y en el IES Miguel Ángel González de Carril o sus canastas vistiendo la camiseta del Basket Base Club de Vilagarcía, donde reside desde los ocho años tras trasladarse desde su casa natal de Portas. No oculta que su familia es su principal bastión. Sus padres Casián y Pilar, junto a sus hermanos Casián y Emiliano, tienen motivos más que importantes en Manuel para su satisfacción.
- ¿Para llegar a trabajar en banca en Zurich debe haber un arduo camino que recorrer?
- Mi experiencia ha sido un poco diferente. Mi carrera profesional, sin tener en cuenta prácticas durante la carrera en las oficinas centrales de Seur y durante el verano en Cefrico, comenzó directamente con unas prácticas de 6 meses en UBS en Suiza. A los 5 meses se me ofreció un programa de formación interno para el desarrollo de jóvenes recién salidos de la Universidad. Ese programa duró un año y medio, y me abrió las puertas a un contrato fijo cuando finalizó. La principal razón de haber tenido esas oportunidades fue haber tomado la decisión de irme a estudiar a Barcelona. Durante la carrera nos posicionaron para estar lo suficientemente preparados en materia de idiomas, conocimientos y contactos para que nos dieran esa oportunidad inicial.
- Que haya alcanzado un estatus tal siendo usted tan joven descubre, como mínimo, sus altas capacidades profesionales.
- La posición en la que me encuentro ahora mismo es el resultado de muchas decisiones desde antes de irme de Galicia. He tenido la suerte de tener el apoyo de mis padres y mi familia en todo momento. El hecho de tener un hijo estudiando en Barcelona y dos en Madrid fue un reto económico en casa, pero gracias a ellos y a mis padrinos que me acogieron durante mis 5 años en Barcelona, fue posible formarme a un alto nivel, lo cual ha sido clave para estar hoy aquí.
- ¿Cómo y cuándo surgió la oportunidad de coger las maletas y emprender el camino a la ciudad suiza?
- La oportunidad me surgió a través de dos buenos amigos de la carrera. Ellos cogieron las maletas un año antes que yo, mientras yo hacía el Máster. En ese momento yo me estaba planteando diferentes opciones laborales y seguía haciendo entrevistas en Barcelona. Sin embargo, durante una llamada con ellos, me comentaron que en Suiza había ofertas de trabajo que me podían interesar. Conseguí una entrevista telefónica y al mes siguiente estaba en un avión con destino a Zúrich.
- ¿Costó tomar la decisión?
- La verdad es que no, básicamente porque las oportunidades laborales que había en Suiza comparadas con las que tenía en España eran diferentes, así que fue una decisión relativamente fácil. Mi idea inicial era conseguir experiencia laboral de 1 o 2 años y volver a España, pero la calidad de vida que he conseguido aquí, y lo mucho que me estoy desarrollando en el trabajo, han hecho que me quedase más tiempo.
- ¿Cuándo empezó su carrera universitaria ya tenía en mente no ponerse ningún tipo de límite a la hora de desarrollar su labor profesional?
- Creo que no todo el mundo está dispuesto a sacrificar tiempo con familia y amigos de toda la vida a cambio del desarrollo profesional, y eso es completamente respetable. Yo he tenido la suerte de criarme en una familia donde la emigración se ha visto como una oportunidad, no como una necesidad; y creo que muchos gallegos tendrán la misma experiencia que yo.
- ¿En qué consiste exactamente su trabajo allí?
- Explicado de manera simple, mi trabajo consiste en conseguir que los asesores financieros de los clientes latinoamericanos con cuentas en Suiza puedan ofrecer las mejores propuestas de inversión a los clientes, y consigan llegar a sus objetivos de ventas. Eso implica proporcionarles la información que necesitan en materia de inversiones, en analizar oportunidades de negocio y crear iniciativas de ventas para fomentar más actividad.
- Abrirse una cuenta en Suiza es casi el paradigma de la máxima bonanza económica posible, ¿es tanto así?
- Digamos que aquellas personas que tienen cuenta en Suiza solo tienen parte de su patrimonio aquí, por lo que sí, puede decirse que nuestros clientes, en general, gozan de una situación cómoda.
- Explique grosso modo cuáles son las ventajas que ofrece Suiza en materia financiera.
- Abrir una cuenta en Suiza ya no tiene los beneficios fiscales de los que disfrutaban nuestros clientes antes de la crisis financiera. Ha habido una presión en materia regulatoria muy fuerte para que Suiza (entre otros países) iniciase un intercambio de información con los gobiernos centrales sobre el patrimonio que nuestros clientes mantienen aquí.
Sin embargo, aunque diferentes a las del pasado, las ventajas siguen siendo importantes. Suiza disfruta de una estabilidad política y económica que lo hace un país idóneo para diversificar riesgos. Por ejemplo, nuestros clientes argentinos sufren una situación política y económica que no es idónea, y su principal preocupación es que su patrimonio no esté en peligro. Además, la profesionalidad de la banca suiza es difícilmente igualable, gracias a la historia que tiene el país en cuestión de seguridad, neutralidad, discreción, y protección de la privacidad.
- Precisamente la Justicia española ha mirado mucho allí para investigar casos de corrupción.
- Como he dicho, la situación actual no es la que era hace 10 años. Es cierto que históricamente ha habido algunos casos de corrupción de españoles con cuentas en Suiza, pero como ya he comentado, la regulación actual es mucho más estricta y transparente con las autoridades fiscales, así que esa situación ha cambiado mucho.
- Hablando de España, ¿qué es lo que hacen tan bien los suizos en materia financiera que pueda importarse en la banca española?
- Primero, creo que la pregunta no es tanto qué hace bien la banca suiza, que se puede resumir en la captación de talento internacional gracias a sus oportunidades laborales (sobre todo para gente joven); sino la forma de pensar y trabajar de los suizos en general. Cuando llegué me sorprendió la gran profesionalidad de la gente, y el compromiso que hay en relación al puesto de trabajo. Además, la cultura que hay en Suiza como país favorece una gran calidad de vida, sobre todo en una ciudad tan bien organizada y posicionada como Zurich.
- Como buen aficionado al baloncesto que es, parece que trabajar en Suiza en banca es como estar en la NBA financiera.
- Aunque podemos encontrar oficinas bancarias en todo el mundo, y en todas ellas hay banqueros que aconsejan sobre como invertir el dinero, creo que el hecho de que Zúrich sea una de las principales sedes financieras globales ayuda a hacer tal comparación. Se podría decir que la banca suiza es parecido a un equipo de la NBA, que compite con otros equipos como Nueva York, Londres, Hong Kong o Singapur.
- ¿Cuál o cuáles son los mejores consejos que le han dado para ser cada vez un poco mejor en su profesión?
- Creo que el mejor consejo que se puede aplicar a cada profesión es que es tan importante ser bueno en lo que haces como tener una buena cultura de trabajo.
- ¿Es muy exigente su trabajo o le queda tiempo suficiente para sus aficiones?
- Tengo la suerte de que en Suiza y en UBS se fomente muchísimo que los trabajadores disfruten de un equilibrio profesional y personal. Eso me deja tiempo para seguir haciendo deporte, incluido baloncesto por supuesto, viajar o simplemente disfrutar de las amistades que he creado aquí.
- Se supone que le llegarán muchas ofertas de empleo dada su capacidad. ¿Se plantea un regreso a España?
- Sí, volver a España siempre ha sido una opción. Sin embargo, no es algo que me plantee a corto plazo. Creo que aún me queda mucho recorrido profesional aquí, pero si algo he aprendido es que siempre hay que dejar la puerta abierta a las buenas oportunidades.
- ¿Y cómo se va llevando el tema de la morriña?
- Cada vez mejor, claramente siempre se echa de menos la tierra. Pero he conseguido crear una vida aquí rodeado de muy buenos amigos que hace que estar lejos sea más fácil. Los emigrados lo entenderán, las relaciones que creas en situaciones así son como familia ya que nos tenemos que apoyar unos a otros.
