Merlo, As miñas cousas y Gisela sonaron ayer tarde en la plaza de Concello con motivo del homenaje a Xico Caneda, dando así pistoletazo a las nuevas actuaciones de los Cantos de Taberna. Fue un momento muy emotivo para familiares, amigos y asistentes al acto homenaje presentado por Miguel Besada.

"Organizar esta actividad es un orgullo grande para nosotros", reconoce Ángel Parada, miembro de la agrupación musical Os Firrás y principal organizador del evento junto al Concello de O Grove. Una programación que empezaba bajo su dirección el pasado mes de abril con el homenaje a Paco Padín, el primero de los cuatro personajes, ya desparecidos, a los que van dedicadas las actuaciones este año.

Los organizadores se muestran muy satisfechos con la acogida de los Cantos de Taberna, tanto por parte del público como por parte de los locales colaboradores en la actividad, puesto que "sin ellos sería muy difícil llevarla a cabo", asegura el organizador. Arrancar una programación cuesta una cantidad de dinero importante, destinada sobre todo a los grupos que actúan, "y es cierto que los locales arriman bastante el hombro".

Xico Caneda

Ayer le tocó el turno al polifacético Xico Caneda, desaparecido hace ahora 14 años, un hombre conocido por todos en la localidad que además de ser músico y compositor aficionado, era periodista ocasional, entre otras cosas. Caneda no solo era de los que cantaban en las tabernas, sino que también compuso letras para las comparsas durante la dictadura, "era único componiendo", recuerda Parada, "y además tocaba la guitarra y la batería". Formaba parte de las orquestas locales que por aquel entonces existían en el pueblo, que no eran más que grupos de amigos con cuatro o cinco instrumentos que tocaban y cantaban en bodas y por supuesto en tabernas. Y fue, además el compositor del himno del desaparecido club Deportivo Grove allá por el año 1966, en la memoria de muchos vecinos. Cantos de Taberna abrió ayer el acto de homenaje cantando una de sus canciones, ni más ni menos que el bolero Gisela.

Con el permiso de las familias de los homenajeados, los componentes de Os Firrás pretenden recuperar las canciones de antaño, sobre todo las compuestas por los numerosos artistas del Grove. "Hasta este momento habremos recuperado sobre unas veinte", señala Parada.

Gruposa

Desde que se pusieran en marcha los Cantos de Taberna surgieron varios grupos con ganas de seguir poniendo voz y música a las tabernas del municipio, y sobre todo de recuperar bonitas tradiciones que estaban muy arraigadas en el pueblo. A Os Firrás, Arroba de Viño o Cantodorxo, se suman ahora las féminas de Cinco en Zocas, y la agrupación QuillArriba, formada por un grupo de jóvenes con una media de edad de 30 años. Ayer los acompañaban en la aventura Retesías, Aquí e Alá e Maravallada, de Portonovo, y Castro Curbín, O son das ondas, Airiños do Mar de Teis, Xoldra Rachada e Os Perucos, procedentes de otros lugares de Galicia. El interés y la aparición de nuevas formaciones "garantiza la continuidad de los cantos en el tiempo".

O Grove es uno de los sitios donde más se canta, afirma Parada. Esta tradición hace que sean los propios grupos de fuera del municipio los que se pongan en contacto con la organización para participar.

Un pueblo de artistas

Asegura Parada que para homenajear a todas las personas que contribuyeron a la riqueza de la música popular en la península meca, harían falta por lo menos diez años, "y seguro que nos quedaríamos cortos". Esta vez, los afortunados, "que ya non están aquí para verlo", son además de Caneda y Padín, Moncho "o da imprenta", quien tenía una "voz maravillosa", señala, y José "o coxo", del que cuentan tenía una especial picaresca para escribir letras y participaba en las rondallas de la localidad. Sus canciones, según recuerda Parada, se siguieron cantando como canciones populares.

Corrían los años 60 cuando estos y otros artistas mecos dejaron su huella en música popular, dejando como legado serenatas y boleros que hoy día vuelven a tener vigencia gracias a los Cantos de Taberna.