“Igual alguna vez no debí delegar tanto”, admite Lores, al hacer balance del primer año de mandato

“Sentamos las bases de uno de mis mejores períodos como alcalde”, afirma el primer edil de Pontevedra

Miguel Lores, con Eva Vilaverde a su lado, hace balance de gestión de este primer año de mandato.

Miguel Lores, con Eva Vilaverde a su lado, hace balance de gestión de este primer año de mandato. / Gustavo Santos

“Igual alguna vez no debí delegar tanto”, dijo el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, al hacer balance de este primer año del actual mandato. Lores hizo esta valoración de los primeros doce meses de este séptimo mandato unos días antes de que se cumpla y debido a que este jueves comienza la campaña electoral de cara a las europeas. “No queremos interferir”, explicó.

Tras ganar las elecciones municipales, hace casi un año, Lores declaró que “estos resultados me mandan un recado. Los pontevedreses quieren que lo haga mejor. Tomo toma y voy a intentar mejorar”. Para Lores, estos doce meses demuestran “la coherencia y el compromiso que caracterizan a mi gobierno. Aprendimos de los errores para mejorar la calidad de vida de los pontevedreses” y reconoció que no estaba satisfecho con el funcionamiento del gobierno local en ese momento, que "existían disfunciones”. Así admitió la falta de ejecución de “proyectos que se eternizaban”, o que “algunos servicios estaban atascados”. Como primera medida, Lores decidió ponerse al frente del gobierno, con el objetivo de abrir “un nuevo periodo”, con gestos como hacerse, por primera vez desde que es alcalde hace casi 25 años, portavoz del gobierno local.

Yendo a lo concreto, Lores se propuso, en el inicio de este nuevo mandato, mejorar el mantenimiento de la ciudad y desatascar proyectos comprometidos para Pontevedra. Y así puso como ejemplo obras como las de A Santiña, A Parda, o el pabellón de Monte Porreiro. También quiso desatascar la renaturalización de los Gafos, o los proyectos dependientes de Costas del Estado. “Sentamos las bases de uno de mis mejores mandatos como alcalde”, afirmó Lores.

“En política, lo importante es aprender de los errores, con el objetivo de corregirlos y, en nuestro caso, mejorar la vida de los pontevedreses. De este modo, tomamos distintas decisiones”, explicó Lores, para luego señalar su insatisfacción con el funcionamiento del gobierno municipal anterior, al existir una serie de disfunciones que tenían que ver con la descoordinación entre servicios y la falta de seguimiento en la ejecución de los proyectos, "lo que hacía que se eternizaran".

“Creo que la mejor manera de explicarlo y con la metáfora del acordeón, que cómo sabéis cuando se estira mucho o cuando se aprieta mucho no produce ningún sonido”, sintetizó Lores.