Pontevedra apuesta por declarar zonas tensionadas para el alquiler en la ciudad

El BNG aceptará una propuesta del PSOE para analizar la situación en el casco urbano

Escaparate de una inmobiliaria

Escaparate de una inmobiliaria / Gustavo Santos

El Concello de Pontevedra apuesta por declarar algunas zonas de la ciudad, aún por decidir, como área tensionada para el alquiler, ante la subida constante de los precios. El gobierno local aceptará una propuesta al respecto formulada por el PSOE con el fin de analizar la situación del c asco urbano y adoptar medidas que permitan copar los precios. Así lo ha anunciado este miércoles el concejal de Urbanismo Alberto Oubiña.

Ya hace unas semanas, el Concello anunció la elaboración de un estudio sobre la situación del alquiler en la ciudad, para adelantarse a la posible declaración de zonas de mercado residencial tensionado en Galicia, que plantea la Xunta, y a la Ley de Vivienda impulsada por el Gobierno central. Sin embargo, el informa aún no se ha encargado por la falta de fondos específicos para ello debido al retraso del presupuesto municipal de 2024.

Eeste estudio llega una vez que la Xunta ha abierto la vía legal para declarar zonas de mercado residencial tensionado, lo que permitirá poner tope a los alquileres a petición de los concellos. Se trata de un mecanismo contemplado en la Ley de Vivienda impulsada por el Ejecutivo de Pedro Sánchez.

Se prevé que según la nueva norma serán los ayuntamientos los que soliciten la declaración de áreas tensionadas y deberán justificar su petición. Oubiña ha apuntado que por el momento no se ha decidido qué barrios o áreas serán los elegidos, a la espera de disponer del informe.

Un estudio del Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS) situó estas zonas tensionadas en el centro histórico, la zona de O Burgo, A Parda, gran parte de Campolongo, Monte Porreiro, el entorno del río e incluso los tramos más próximos al casco urbano de Salcedo, Lérez, Marcón, Salcedo o Mourente. Estos ocho emplazamientos de la ciudad se consideran “tensionados” después de que las cuotas hayan subido más de un 21% en cinco años.

Esas zonas se basan en los códigos postales, por lo que abarcan más territorio del realmente afectado. En todo caso, se aclara que hay dos áreas más “dudosas” (incluye en ellos a Xeve y parte de Salcedo y Tomeza) por el escaso número de alquileres en ellos , que impiden fijar una pauta, y cinco más “no tensionados” , con Campañó, Alba Cerponzóns, Ponte Sampaio o Lourizán y Estribela, en las parroquias, y la zona sur de la ciudad, en especial Mollavao o San Blas. Hay seis áreas sin datos, dos en el casco urbano y cuatro en el rural.

Estos datos figuran en un informe del Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS) sobre las posibles áreas tensionadas, según los balances de precios y contratos del Gobierno central y de la propia Xunta. Según la Ley de Vivienda podrán declararse zonas tensionadas aquellos municipios o áreas que cumplan uno de estos dos requisitos: que la carga media del coste de la hipoteca o del alquiler en el presupuesto familiar, más los gastos y suministros básicos, supere el 30% de los ingresos medios de ese hogar o bien que el precio del arrendamiento haya experimentado en los cinco años anteriores un porcentaje de crecimiento acumulado superior al menos tres puntos porcentuales al incremento del IPC.