La salida de Marta Fernández-Tapias obliga a López a remodelar su equipo en la Diputación

El organigrama de la Diputación de Pontevedra cambiará en las próximas semanas por la salida de la política de Marta Fernández-Tapias, hasta ahora vicepresidenta provincial –y hasta este lunes, que se hizo efectiva su renuncia, presidenta del PP de Vigo–. Mientras el presidente de la Diputación, Luis López, no ha querido desvelar nada, sobre la mesa hay tres posibilidades para una reestructuración que será inevitable: que la institución se quede con Rafa Domínguez como único vicepresidente, que se mantenga el modelo de dos vicepresidencias, por lo que simplemente se buscaría un sustituto o sustituta para Fernández-Tapias, o que se amplíen las vicepresidencias con el objetivo de abarcar más zonas de la provincia.

“No hay nada decidido en cuanto al organigrama de la Diputación porque el pleno no tuvo todavía conocimiento de su renuncia, que se formalizará en el pleno de este viernes”, señaló ayer Luis López, que apuntó que la decisión definitiva se tomará cuando se incorpore el relevo de Fernández-Tapias.

El presidente provincial bromeó con que ahora pasará “lo típico” de cuando “alguien da un paso al lado” y aparecerán “quinielas con diez nombres”, hasta que el partido tome una decisión.

Y así es, porque los primeros nombres de posibles sustitutos en la Diputación ya han empezado a salir. Entre ellos, el de la alcaldesa de Marín, María Ramallo, que suena con fuerza por los grandes resultados que está obteniendo en el municipio y porque en el Partido Popular prefieren que sea otra mujer la que releve a Fernández-Tapias, aunque en su entorno se desconoce esta posibilidad; en contra de Ramallo juega que la otra vicepresidencia la ostenta Rafa Domínguez, del área de Pontevedra, y la intención es seguir dándole un peso específico e importante a Vigo, por eso tampoco se descarta que se amplíe el número de vicepresidencias, para llegar a más zonas de la provincia.

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