Se dispara el censo de viviendas turísticas en la ría: en Sanxenxo ya son el 15% del parque inmobiliario

Un tercio de los domicilios del centro histórico de Combarro se destina ya a uso vacacional

Unos turistas fotografían un hórreo en Combarro. |   // GUSTAVO SANTOS

Unos turistas fotografían un hórreo en Combarro. | // GUSTAVO SANTOS / F. Martínez

El encarecimiento de la vivienda, la reducción de la oferta de alquiler de larga duración, la pérdida de población residente y todos los problemas que lleva consigo el turismo son los inconvenientes que se asocian al mercado de viviendas de uso turístico. Sin embargo la demanda de esta alternativa de alojamiento vacacional no deja de crecer, como también la oferta. Todos los municipios del área de Pontevedra suman cada año pisos turísticos y Sanxenxo –uno de los que más oferta acumula en Galicia– llega ya a las 2.692, el 15,2 por ciento del total de viviendas del municipio.

La ciudad de Pontevedra, con 424 pisos de uso turístico, solo destina a este fin el 0,9% de su parque inmobilario, de 42.646 viviendas.

El caso de Combarro

Pero un caso relevante del avance de este mercado en el área de Pontevedra es el del centro histórico de Combarro, en Poio. Este conjunto histórico-artístico, que reúne un total de 298 edificaciones (en 347 domicilios) suma ya 108 viviendas turísticas. Quienes se acerquen a disfrutar de la bonita arquitectura de esta singular villa se encontrarán con que un tercio de sus viviendas están ya ocupadas por turistas. La población local resiste, por el momento, en dos de cada tres casas de Combarro.

Pero tanto en este recinto histórico como en el resto de los pueblos de la costa de la Rías Baixas, la oferta de pisos de alquiler vacacional sube año tras año. En la ciudad de Pontevedra se contabilizaban en 2021 unos 300 pisos destinados al turismo. El pasado 1 de septiembre ya eran 424, según los datos de Turismo de Galicia. Son unas 1.500 plazas de hospedaje en la ciudad.

La población local resiste, por el momento, en dos de cada tres casas de Combarro

Sanxenxo pasó de las 1.100 viviendas vacacionales de hace dos años a las casi 2.700 de este septiembre, lo que supone unas 5.700 plazas de hospedaje.

Poio –incluyendo los datos de Combarro–, alcanza los 414 pisos “de veraneo”, cien más que hace dos años, lo que representa el 4,4% de su parque inmobilario, de 9.381 viviendas.

Marín, con 12.577 domicilios, destina a este mercado un total de 168 viviendas, el 1,3% del total, cuando dos años atrás su oferta de pisos turísticos apenas superaba el centenar.

Así, la vivienda vacacional sigue ganando terreno en cada uno de los municipios de la costa de Pontevedra, lo que a ojos de sus detractores supone el encarecimiento de la vivienda, de los alquileres de larga duración y, con ello, que jóvenes y colectivos económicamente vulnerables tengan cada vez más difícil acceder a la vivienda.

Pero los propietarios de esta nueva oferta de hospedaje turístico rechazan que se les intente cargar la responsabilidad de la crisis habitacional. El verdadero problema del mercado inmobilario tiene su origen en las “políticas nefastas en materia de vivienda” que se han desarrollado durante los últimos años, afirma Dulcinea Aguín, presidenta de la Asociación de Vivendas Turísticas de Galicia (Aviturga).

La portavoz de los propietarios de pisos turísticos recuerda a los políticos que ahora tratan de poner trabas al sector, que precisamente muchas de estas administraciones, particularmente concellos, no destinaron a vivienda protegida y a la promoción pública el porcentaje del parque inmobiliario que les correspondía, mientras que incentivaban la promoción privada.

Cifras “poco relevantes”

Por otra parte, los propietarios de vivienda turística niegan que estas habitaciones supongan una cifra relevante en los municipios de nuestro entorno. Así, según los datos del Instituto Nacional de Estadística, las viviendas de uso turístico representan en Galicia el 0,92% de su parque inmobiliario. En Pontevedra este porcentaje se eleva hasta el 1,29%, por tener el que posiblemente sea el municipio con mayor actividad turística de Galicia, Sanxenxo, pero en ningún caso este número de viviendas vacacionales representa un porcentaje importante dentro de la oferta habitacional de los municipios gallegos, como explica Dulcinea Aguín.

En A Coruña esta influencia del parque de vivienda turística es del 0,87%, en Lugo es del 0,90% y en Ourense se queda en el 0,32% de sus viviendas.

Además, –recuerda Aguín– Galicia tiene un 17,5 por ciento de viviendas vacías y la alternativa del alquiler turístico ha supuesto un complemento y un “respiro económico” para muchas familias que hasta ahora tenían esas casas vacías.

“No es un problema para la vivienda, nunca lo fue, ni lo será”

En todo caso, los datos vienen a demostrar que el uso turístico de los domicilios “no es un problema para la vivienda, nunca lo fue, ni lo será”, dice Aguín Pombo, dado que su número se mantiene en unas cifras muy bajas respecto al parque inmobiliario de nuestro entorno.

En cuanto a la mayor rentabilidad del alquiler turístico sobre el del larga duración, Aguín recuerda que se trata de un negocio, que como cualquier otro intenta obtener beneficios. Y como cualquier otra actividad económica –añade Aguín– dinamiza la economía, genera empleo, paga impuestos, y en muchos casos esta nueva actividad “ha salvado muchas economías familiares”.

En Pontevedra solo en bajos, primera planta, o edificio completo

Cada municipio tiene sus criterios a la hora de regular las viviendas de uso turístico, con lo que su presencia puede ser un problema, o no, dependiendo de la forma en que la administración local ordene esta actividad. El Concello de Pontevedra mantiene una política restrictiva a la hora de permitir viviendas de uso turístico. La ciudad limita ese tipo de alojamientos a viviendas unifamiliares, que deben estar situadas en planta baja o primer piso (como cualquier otra actividad económica), o bien destinando un edificio completo a este fin. Una reciente sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) avaló estos criterios.

Mundial de Triatlón

Precisamente la presidenta de la Asociación de Vivendas Turísticas de Galicia, Dulcinea Aguín, pone como ejemplo el caso de Pontevedra y la celebración de eventos como la reciente Gran final del Mundial de Triatlón que se celebró en la ciudad, para explicar por qué muchas personas –en este caso muchos deportistas llegados de todo el mundo– prefirieron este tipo de hospedaje a los establecimientos convencionales: “Para sentirse como en casa, para adaptar sus horarios de entrenamiento, descanso y competiciones sin interferencias; y porque es mucho más cómodo para guardar sus enseres, bicicletas y otros materiales”, explica la portavoz de los propietarios de vivienda de uso turístico.

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