Valdecorvos aún no se completa: sin compradores de los dos últimos solares de viviendas protegidas

El concurso convocado por la Xunta para adjudicar dos parcelas en el polígono queda desierto al no recibirse ninguna oferta | Los terrenos, que suman más de 4.300 metros cuadrados, son los únicos ahora disponibles

Uno de los inmuebles residenciales que levanta la iniciativa privada en la zona.

Uno de los inmuebles residenciales que levanta la iniciativa privada en la zona. / Rafa Vázquez

El polígono residencial de Valdecorvos no logra completar su desarrollo. Xestur, la empresa pública de la Xunta que gestiona el suelo residencial de titularidad autonómica en la Xunta (propietario de varias parcelas edificables en Valdecorvos) no ha encontrado compradores en la subasta de sus últimas parcelas en esa urbanización. Se trata de dos solares que suman más de 4.300 metros cuadrados y que tienen capacidad para acoger más de un centenar de viviendas protegidas. Ninguna empresa o cooperativa se ha interesado por estos solares, con un precio mínimo aproximado de 2,8 millones, si bien las valoraciones que establece la Xunta llegan a superar los 4,5 millones por ambas fincas.

El concurso incluía estos dos solares de Pontevedra, pero también terrenos similares en A Coruña, Ferrol y Lugo y Xestur acaba de conocer las ofertas de adquisición, que solo optan a cinco terrenos en el Parque Ofimático coruñés. En todo caso, las demás parcelas podrían ser adquiridas en cualquier momento si aparecen interesados.

Este concurso incluía, como novedad, la posibilidad de que las parcelas podían adjudicarse en régimen de derechos de superficie, con una duración de 60 años y la obligación por parte de los promotores de que las viviendas se destinen al alquiler.

La intención de la Xunta con esta subasta era completar la adjudicación de todos los suelos edificables de Valdecorvos, unos terrenos que se urbanizaron en 2010. En el polígono ya existe un edificio de 132 pisos de promoción pública, entregados en 2016, y se trabaja en el diseño de un segundo inmueble de este tipo, para otras 76 viviendas de promoción pública (VPP). El Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS) adjudicó recientemente la redacción del proyecto técnico, por lo que la ejecución efectiva aún no es a corto plazo.

El contrato fue adjudicado por un importe de 515.151,51 euros. La empresa dispondrá de un plazo de dos meses para redactar el proyecto básico y de tres meses adicionales para elaborar el proyecto de ejecución, a pesar de que el contrato se extenderá durante toda la ejecución de los trabajos constructivos, ya que en él se incluye también la dirección de obra. Según la Xunta, estas 76 VPP están incluidas en la Estrategia de vivienda de promoción pública e impulso de la vivienda protegida, aprobada por el Consello de la Xunta a finales del pasado mes de marzo, en ejecución del Pacto social por la vivienda 2021-2025.

Su construcción supondrá una inversión superior a los 9,5 millones de euros, de los que más de 5,7 millones serán fondos propios aportados por la Xunta y 3,8 millones de euros procederán de la Unión Europea.

Al margen de estos dos solares con pisos de promoción pública, se adjudicaron otras parcelas a cooperativas para viviendas colectivas y adosadas. Por su parte, el Concello dispone de un terreno, en principio para pisos protegidos, pero el gobierno local no contempla ese uso.

La variación de precios en la su basta que ahora queda desierta depende del régimen de protección al que se acojan las viviendas (general, especial o concertado) y de los pisos que se vayan a levantar en los suelos que se subastan. En concreto, se trata de una parcela de 3.201 metros cuadrados, valorada entre 1,5 y 2,5 millones aproximadamente, y otra de 1.147 metros cuadrados, cifrada entre 1,3 y 2,3 millones. En la primera se podrían ejecutar 56 viviendas y otras 48 en la segunda.

Los adjudicatarios de terrenos en derecho de superficie pagarán un canon anual equivalente al 0,1% del precio de venta del solar, con revisión anual según el IPC. También podrán solicitar un período de carencia de dos años. Además y al igual que en convocatorias anteriores, el suelo ofertado también podrá ser adjudicado en régimen de compraventa. En este caso, el precio se fijará en función del régimen de protección que solicite el adjudicatario, de forma que las parcelas para vivienda en régimen especial tendrán los precios más bajos y las del régimen concertado, las más altas, estando situadas entre ambas el régimen general.

Mil familias a la espera de piso

Hace más de seis años, en 2016, se entregaron los pisos de la última gran iniciativa de viviendas de promoción pública (VPP) que ejecutaba la Xunta en la ciudad. La ejecución de estos 76 nuevos pisos se plantea en el cuarto municipio gallego con más demanda oficial, en el Rexistro de Demandantes de la Xunta. En Pontevedra había ayer 1.058 inscritos, solo por detrás de Vigo (casi 6.500), A Coruña (algo más de 2.000) y Lugo (1.410).

De esas más de mil familias, la mayor parte opta al alquiler o compra de un piso de promoción pública, los que ejecuta y adjudica directamente la Xunta. Son 980 las peticiones en este apartado, la tercera mayor demanda de Galicia. La demanda actual en la ciudad de Pontevedra es superior a la existente hace un año. En julio de 2022 eran 944 las solicitudes totales, de las que 887 correspondían a viviendas de promoción pública. En los otros trece municipios de la comarca son 352 las familias inscritas en el registro oficial de la Xunta, cuarenta más que hace un año y concentradas sobre todo en Marín (unos 90), Poio (alrededor de 80), Caldas y Cerdedo-Cotobade, ambas en torno al medio centenar en cada caso. La demanda en Sanxenxo ronda la treintena de personas, al igual que en Barro, mientras que en el resto de municipios, las inscripciones son muy bajas, por debajo de diez en todos los casos. De hecho, en Portas , Cuntis y Campo Lameiro solo hay una petición en cada caso y apenas tres en Moraña.

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