Caldas constituye una plataforma municipal por la defensa de la sanidad

Convocan una manifestación en Moraña por la situación del centro de salud

Redacción

Caldas de Reis contará con su propia plataforma en defensa de la sanidad, después de que este miércoles el alcalde de la localidad, Juan Manuel Rey, manifestase la colaboración de la Administración local con el presidente de este nuevo organismo, José Manuel Suárez, y el portavoz de SOS Sanidade Pública, Manuel Martín.

Esta organización, señalan desde el Concello, estará integrada por asociados y asociadas locales y se mantendrá abierta a todos los vecinos, permitiendo así canalizar las demandas y reclamaciones en defensa de la sanidad pública.

En este sentido, Rey, valoró muy positivamente la creación de esta plataforma cívica, ya que “su objetivo principal es sumar los esfuerzos de todos y todas sin importar colores políticos o ideologías”.

El regidor caldense recalcó la intención de trabajar conjuntamente “colaborando con la labor de esta asociación y tejiendo canales de diálogo institucionales”, haciendo referencia a acoger así a los vecinos y vecinas de los municipios próximos “que quieran reivindicar su derecho a un PAC digno y a una atención médica de calidad gracias a un espacio de diálogo y consenso”.

Por otra parte, el BNG de Moraña ha convocado una manifestación para el próximo 22 de enero, a las 12.00 horas, con salida desde el ambulatorio de Santa Lucía para denunciar la situación que atraviesa el centro de salud de la localidad.

Según los nacionalistas, el ambulatorio continúa día tras día sumido en lo que califican como un “caos”. “Sin médicos, anulando citas desde hace cinco meses, con niños sin pediatra asignado y con una situación límite de tensión y colapso que están pagando también, además de todos los usuarios, los profesionales que allí trabajan”, señalan.

Los convocantes de la protesta afirman que el personal del centro de salud no es culpable ni responsable de la situación, al trabajar en unas condiciones inasumibles. Exponen que la carga de trabajo a la que se enfrentan a diario afecta de forma directa y grave a los vecinos.