Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La vuelta al cole (también) de la educación especial

Amencer-Aspace cuenta con 15 alumnos en su colegio en Lourizán, tres de ellos en modalidad de escolarización combinada

Comida con el uso de un Sistema Aumentativo y Alternativo de Comunicación en Amencer. // GUSTAVO SANTOS

Las tradicionales imágenes de la vuelta al cole a menudo se olvidan de los niños y niñas de la educación especial, aunque en estos días se esté hablando mucho de ellos por la falta de profesionales en los centros ordinarios públicos con escolarización combinada que realmente se puedan hacer cargo de sus necesidades específicas.

En muchos casos, bien porque los equipos de orientación de la Consellería de Educación así lo aconsejan, bien porque las familias así lo deciden para que reciban una atención intensiva, estos menores acuden en exclusiva a centros de educación especial, como el de Amencer-Aspace en Pontevedra, asociación creada en 1991 por familias de personas con parálisis cerebral. Por el momento, el colegio de Lourizán tiene 15 alumnos, de los que solamente tres de ellos asisten en modalidad combinada.

También ellos han iniciado el cole y lo hacen en aulas con bajo número de alumnos. Pepa Menduiña es la directora de este centro educativo, en el que, como no podía ser de otro modo, también hay comedor para todos los menores.

Utilización de una tablet durante una clase. GUSTAVO SANTOS

La educación está a años luz de la de hace, por ejemplo, una década, sobre todo debido a los avances tecnológicos y de dispositivos que hacen la vida más fácil tanto a los niños como a los profesionales que los atienden. En las aulas ha supuesto toda una revolución el uso, por ejemplo, del SAAC, un Sistema Aumentativo y Alternativo de Comunicación, a través del cual los menores pueden expresarse con solo la utilización de sus ojos. “Se calibran a la altura de la vista de los usuarios y ellos dirigen la mirada hacia los iconos correspondientes. Se usan mucho con los niños en comunicación emergente, que están empezando”, explica la directora. “Los usamos en clase y en el comedor también, para generalizar su uso y llevar el lenguaje a situaciones cotidianas”.

“Los SAAC los usamos en clase y en el comedor también, para generalizar su uso y llevar el lenguaje a situaciones cotidianas”.

Pepa Menduiña - Directora del colegio de educación especial de Amencer-Aspace

decoration

El protocolo COVID en este tipo de colegios sigue vigente por el momento en lo referido al uso de la mascarilla, al tratarse de centros sociosanitarios. Es un tema complicado, ya que la comunicación con los alumnos y usuarios depende en gran medida del simple movimiento de la boca de los profesionales.

Por el contrario, ya desaparecen las distancias y se pueden realizar actividades grupales como antes.

“No vale café para todos”

La gerente de Amencer-Aspace, Mónica Touriño, explica que el centro educativo cuenta con un maestro por aula para una ratio de entre cuatro y cinco alumnos y un cuidador para cada ocho, “aunque lo ideal sería uno por unidad, cada cuatro o cinco”. A mayores hay una logopeda, una fisioterapeuta y una terapeuta ocupacional y una psicóloga que trabajan a demanda.

Touriño se confiesa una firme defensora de, como mínimo, la escolarización combinada, “siempre y cuando sea posible, porque, utilizando una expresión muy conocida: no vale café para todos; cada alumno tiene unas necesidades educativas diferentes y lo que hay que verlo es a él”.

Recalca que hoy por hoy la recomendación en base a la normativa europea es de comenzar siempre por mayoría de días en los colegios ordinarios “y que la educación especial sea la alternativa secundaria”. “Cuando los niños no van bien en la educación ordinaria se aumenta el número de días en la especial”, resume.

“Desde nuestro punto de vista, nosotros entendemos los centros de educación especial como centros de alto rendimiento"

Mónica Touriño - Gerente de Amencer-Aspace

decoration

“Desde nuestro punto de vista, nosotros entendemos los centros de educación especial como centros de alto rendimiento. Si hay un deportista de élite al que quieres sacarle lo mejor no lo mandas a un centro ordinario. Pues nosotros creemos que el proceso debería empezarse desde un centro de educación especial y que los especialistas valoren sus necesidades y, en función de eso, deriven al alumno un determinado número de días a la ordinaria. Pero esto no funciona así”, se lamenta.

Mónica Touriño recuerda que en Amencer-Aspace cuentan con un equipo de orientación gratuita para aquellas familias que duden sobre qué educación es la más adecuada para sus hijos.

El mes de septiembre, además de comenzar el curso, supone que todos los centros de la asociación recuperen la actividad paralizada en agosto. “Los centros de día están deseando recuperar las actividades en exterior y en los educativos porque ya no tienen que trabajar en aulas burbuja. Vamos a trabajar en todo ello y estamos muy ilusionados”, avanza la gerente de la asociación, que cuenta con 185 socios numerarios, con familiares con parálisis cerebral o patologías afines, y 99 socios protectores, cifra que puede engrosar cualquier ciudadano que desee contribuir económicamente.

Compartir el artículo

stats