El Concello de Caldas de Reis se ha visto obligado a parar temporalmente las obras de saneamiento que se estaban desarrollando en la Calle Real tras encontrarse unos restos arqueológicos a solo diez metros del final del tramo en el que se estaban realizando los trabajos.
Los primeros resultados, aunque todavía no son concluyentes, parecen indicar que se trata de una serie de guijarros que podrían pertenecer a una senda, de origen todavía por determinar.
Desde el Gobierno local confirman que técnicos municipales y de la Dirección Xeral de Patrimonio de la Xunta de Galicia están llevando a cabo trabajos de extracción, identificación, inventario y documentación de los restos encontrados bajo la calle, a fin de hacer también un reportaje fotográfico que sirva como composición del lugar.
La mejora que se había puesto en marcha, según la alcaldía del municipio, está relacionada con el ámbito del embellecimiento urbano e incluía labores de renovación e instalación de canalizaciones de soterramiento de cables, separativa de aguas pluviales y fecales y saneamiento de la zona.
La obra, realizada con fondos del Plan Concellos de la Diputación de Pontevedra, se enmarca en un proyecto municipal a largo plazo –con más de tres millones de euros de presupuesto– para dotar a la localidad de mejoras en la red de saneamiento de las aguas residuales.
Una acción que se centrará especialmente en lugares del ámbito rural como Paradela, Paraimas, Tivo, Castaños y Pazo, pero que también contempla actuaciones en el casco urbano e histórico como la de la Calle Real.
Al mismo tiempo, la zona en la que se encuentra esta senda es considerada Área de Rehabilitación Integral, para lo que también se destinan fondos estatales. En el caso de esta calle, un porcentaje de la inversión realizada forma parte también de este plan.
