Unas obras en Barro obligan a los alumnos a bajar del autobús a mil metros del colegio

El PP denuncia que Educación “no fue informada”

REDACCIÓN

El PP de Barro denunció ayer que las recién iniciadas obras de mejora de la seguridad vial en una carretera provincial a la altura de la Praza de San Amaro, provocan, al menos durante su ejecución, la situación contraria: alumnos de los lugares de Áspera (Portela) y Bretoña (Barro) que acuden al colegio Amor Ruibal en el autobús escolar, deben bajar del vehículo “a mil metros del centro escolar y caminar por una carretera con un arcén de solo treinta centímetros y con escasa luz ya que los niños son recogidos a las 8,20 horas de la mañana”.

El PP señala que las citadas obras han supuesto el desplazamiento de la parada escolar en la N-550, “en un sitio que no dispone de espacio para la parada del autobús, lo que obliga a que en los momentos de entrada y salida de los niños está parado obstaculizando la circulación, con el consiguiente peligro que eso implica”.

Añaden los populares que esta situación “incumple la legislación sobre seguridad viaria y transporte escolar” y que “la Consellería de Educación no fue notificada de este cambio y no tiene conocimiento de la situación”. El PP culpa de este problema a la Diputación y al Concello “por una falta de previsión para ejecutar estas obras sin tener en cuenta cómo afectarían al transporte escolar”.