El noroeste de Ponte Caldelas ha sido este fin de semana el epicentro de dos pequeños terremotos, según indica el Instituto Geográfico Nacional (IGN), al que no le costa que ninguno de los dos temblores fueran sentidos por la población.

El primero de ellos se registró a las 23.38 horas del pasado viernes día 10, a 31 kilómetros de profundidad y con una magnitud de 1,8 grados en la escala Rictcher, mientras que el segundo ocurrió unas horas después, a las 11.40 de la mañana del sábado a 15 kilómetros de profundidad y con la misma magnitud.

Ponte Caldelas fue el escenario de un llamativo "·enjambre sísmico" ocurrido en 2018, un año especialmente intenso en la comarca en cuanto a terremotos de baja intensidad.

De los 70 seismos registrados aquel año ppr el IGN en la comarca, la mayor parte se produjo en aquel "enjambre sísmico" del mes de mayo. Entonces se detectaron casi medio centenar con epicentro en los municipios de Pontevedra y sobre todo Ponte Caldelas entre los días 15, 16 y 17 de mayo. Esos días la tierra también tembló de manera casi imperceptible en O Toural, Vilaboa.

Pero también hubo pequeños temblores en junio en Pontevedra o el 25 de julio en Marín, con un seismo que llegó a los 2,5 grados. A finales de agosto se volvieron a registrar movimientos en Ponte Caldelas y Pontevedra y en septiembre hubo también un pequeño enjambre sísmico con siete pequeños temblores cuyo epicentro los sismógrafos situaron en A Escusa, en el monte Castrove, en Poio. Ese mismo mes también se registraron temblores, alguno sentido por la población, en O Grove o en Covas (Meaño).

En septiembre también hubo actividad sísmica otra vez en Ponte Caldelas, un municipio que cerró el año de nuevo con pequeños terremotos, los últimos el día de Navidad (con uno de 2,4 grados) y otros dos más el día 26 de diciembre de menor intensidad.