“Nunca debemos de ser conformistas con la salud oral”, recuerda la presidenta del Colegio de Dentistas, “tiene una enorme repercusión en la salud general. Es evidente que en los últimos años la salud oral de la población, en general, ha mejorado pero hay un amplio margen de mejora. Por eso hay seguir insistiendo en la necesidad de acudir al dentista al menos una vez al año ya que es la única forma de detectar de forma precoz las patologías orales existentes y tratarlas en sus estadios iniciales. Si no se diagnostican a tiempo, los tratamientos serán más complejos. De ahí que sea tan importante adquirir el hábito de ir al dentista a lo largo de las diversas etapas de la vida y no solo cuando aparezca dolor”.

–¿La pandemia ha modificado el escenario de la salud bucodental?

–En lo que afecta a nuestro trabajo diario, más que modificarlo ha exigido una adaptación a las nuevas circunstancias. La actividad de los dentistas siempre se ha desarrollado con unas medidas higiénicas y de bioseguridad muy rigurosas. Con la pandemia, esa seguridad se ha incrementado aún más con nuevos protocolos elaborados por las autoridades sanitarias. En consecuencia, las clínicas eran y siguen siendo espacios seguros para tranquilidad de los pacientes y del personal sanitario. Con respecto a los pacientes, la percepción que tenemos desde el Colegio es que ha habido una mayor preocupación por la salud en general, incluida la bucodental. Y tras el periodo de confinamiento, los pacientes han vuelto a las consultas con normalidad para sus tratamientos, revisiones y mantenimientos.

–¿Disponemos de datos sobre el número de consultas anuales, tratamientos más habituales etc?

–Respecto a los tratamientos más habituales podríamos mencionar las caries, las enfermedades periodontales, ortodoncia, tratamientos estéticos como blanqueamientos, carillas, y rehabilitaciones orales con implantes. El Observatorio de la Salud Oral también enumera las endodoncias, las restauraciones o las limpiezas de boca como otros procedimientos requeridos.

–¿Cuál señalaría como el principal reto a mejorar?

–Habría que mejorar los estándares de salud oral en términos de conservación dentaria en los mayores y de reducción significativa del componente oral causante de inflamación sistémica, que está relacionada con la cardiopatía isquémica, diabetes, hipertensión etc. Para ello, todos nuestros esfuerzos deberían enfocarse en la educación sanitaria y en la prevención de patologías mediante revisiones periódicas en el dentista para diagnósticos precoces y tratamientos conservadores.

–¿Cambian las necesidades de atención en las diferentes etapas de la vida?

–Sin duda. Y por eso es muy importante interiorizar que las visitas al dentista deben realizarse a lo largo de todas las etapas de la vida. Las necesidades de un niño no son las mismas que las de una embarazada, un adulto o una persona de la tercera edad y, por tanto, requieren atenciones específicas que serán establecidas por el dentista. Esa tarea de supervisión y guía resulta fundamental para disfrutar de una buena salud oral durante toda la vida.

–El Colegio de Dentistas ha presentado una campaña centrada en el embarazo ¿por qué es tan importante la salud oral en ese periodo?

–Porque en el embarazo se dan condiciones que podrían afectar a la salud oral, como los vómitos del primer trimestre que podrían causar erosión dentaria. También los cambios hormonales que aumentan la respuesta inflamatoria a las bacterias, las caries, cuyas bacterias podrían relacionarse con las caries de primera infancia. Una información oportuna y consejos sencillos pueden contribuir a que el embarazo transcurra sin complicaciones orales. Solemos recomendar realizar tratamientos durante el segundo trimestre por ser el más estable, pero es seguro y eficaz realizarlos durante todo el embarazo si fueran necesarios.

–Por lo que respecta a los profesionales ¿cuántos ejercen en Pontevedra? ¿considera que la ratio es adecuada en relación a la población?

–En la provincia de Pontevedra ejercen unos 850 dentistas, de los que 109 lo hacen en Pontevedra. Respecto a la ratio por habitante, en España estamos en 2,94 dentistas por cada 3.500 habitantes, por encima de las recomendaciones de la OMS que establecen la ratio en 1 dentista por cada 3.500 habitantes. Por eso desde el Consejo General de Dentistas de España se está demandando a las autoridades desde hace años el establecimiento de números clausus que permitan regular el flujo de titulados y adaptarlo a las necesidades reales.

–¿Qué ha supuesto para los profesionales la irrupción de grandes cadenas de salud bucodental, algunas muy polémicas?

–Es un tema complejo. Si partimos de la base de que estamos en un mercado de libre competencia, es evidente que todo el mundo puede ofrecer sus servicios en el ejercicio de esa libertad. El problema surge cuando esa oferta se basa en señuelos, cuando no en engaños directamente, para llamar la atención del público. Son bien conocidas las nefastas consecuencias que esa forma de actuar ha tenido sobre miles de personas, consecuencias no solo económicas sino también de salud. La Odontología como la entendemos la mayoría no tiene nada que ver con eso. Es una disciplina sanitaria con unas normas éticas bien definidas y que tiene como objetivo preservar la salud del paciente y ahí no caben atajos. Por eso llevamos años reclamando a las autoridades que se establezca una legislación sobre publicidad sanitaria clara e inequívoca que ponga fin a estos casos tan lamentables. Actualmente, desde el Consello Gallego de Odontólogos e Estomatólogos (el órgano de representación de los 3 colegios de dentistas de Galicia) se está trabajando en ese tema.

En la mejora de la sonrisa “seguimos una clara tendencia americana” y gana terreno el diseño digital

–¿Qué consejos daría para tener una bonita sonrisa?

–Incorporar un hábito de higiene oral eficiente para prevenir las caries y las enfermedades de las encías. Hoy en día existen recursos de planificación y diagnóstico que permiten visualizar cómo quedaría nuestra sonrisa antes de realizar un tratamiento de ortodoncia, rehabilitación, estética, etc. Otro consejo muy valioso es respetar los programas de mantenimiento establecidos por el dentista para que los buenos resultados terapéuticos puedan perdurar en el tiempo.

–Una de las áreas en auge dentro de su especialidad también es la belleza dental ¿tanto en el área de salud como de la estética qué avances veremos en los próximos años?

–En los últimos años la sociedad ha puesto en valor la belleza en todos los ámbitos de nuestra vida. En Odontología no podía ser menos debido al protagonismo que ocupa la sonrisa en la cara de nuestros pacientes. Seguimos una clara tendencia americana en la que cada individuo decide si quiere mantener o mejorar su aspecto original. El sector más joven de la sociedad lo tiene claro y cada vez atendemos más jóvenes que reclaman tratamientos de diseño digital de sonrisa, blanqueamientos y carillas de cerámica.