El primer día de conciertos, solo unas horas después de que la Xunta anunciase las nuevas normas para recitales y verbenas, convoca en la mañana de este domingo a numeroso público. Se celebra el concierto de Ortiga, un piloto con el que se testa la revitalización de la cultura en vivo que, de nuevo, prueba su capacidad de ambientación.
El recital se celebra en la plaza de A Ferrería, en un espacio acotado con vallas y con el público sentado y distanciado, entre otras medidas ligadas a la crisis sanitaria. No obstante, en los espacios más próximos se formaron por momentos grupos de peatones, visitantes y turistas. También vecinos sorprendidos por la música, otros de los que se sumaron como espectadores improvisados.
El concierto de Ortiga es un test en uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad para, a medida que avance el año, ir implementando actividades
El concierto se celebra tras una jornada técnica del programa municipal Cabos Soltos que tuvo lugar en el Pazo da Cultura y que se dirigía especialmente al sector de la cultura en directo. Tras estos encuentros, el recital de Ortiga está siendo un test en uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad para, a medida que avance el año, ir implementando actividades.
La concejala de Promoción da Cidade, Anabel Gulías, recordó que el objetivo es dar “un balón de oxígeno a todo el sector creativo y cultural, entendido también como un sector económico que necesita seguir trabajando”.
