Entre las muchas consecuencias nefastas que la pandemia del COVID nos ha dejado en 2020, también destaca la caída de cifras en el Camiño a Santiago de Compostela. Según la información facilitada por la Oficina del Peregrino, el año que acaba de terminar pasaron por la ciudad de Pontevedra, municipio incluido en las dos variantes del Camiño Portugués, el tradicional y el de la Costa, un total de 12.868 peregrinos que sellaron su “compostela” al llegar a la capital gallega durante los poco más de siete meses que se permitió el tránsito libre de personas.
Son siete veces menos que los que habían hecho alguno de los dos trayectos el año anterior, el 2019, cuando se registraron 94.649, con la ruta en pleno apogeo.
De esta forma, y contra todo pronóstico, ha tenido que ser un virus con consecuencias mundiales tanto sanitarias como sociales y económicas, el que haya frenado uno de los principales reclamos de la comunidad gallega. Esto ha supuesto, en el caso de la variante portuguesa, que se haya regresado a cifras de hace una década. En el año 2009, por ejemplo, habían sido alrededor de 12.000 los peregrinos que pudieron admirar la Boa Vila y otros de los municipios de la comarca en su caminar hacia Santiago.
Desde entonces, y especialmente tras la celebración del Año Santo 2010 (cuando ya fueron 34.147 personas recorriendo el Camiño Portugués), las cifras solo podían ir “in crescendo”. El año que acaba de concluir se esperaba batir todos los récords de cara al recién estrenado, Santo. En vista de que la pandemia todavía no da una tregua, la decisión del Papa Francisco de prorrogar esta condición hasta 2022 ha sido celebrada en el mundo entero.
La Asociación de Amigos do Camiño Portugués a Santiago de Pontevedra es una de las que ha acogido con gran alegría este hecho. Su presidente, Celestino Lores, se encontraba cuando se produjo el anuncio en la Catedral de Santiago, en el acto de apertura de la puerta santa.
“Es una alegría porque no solo desde el punto de vista de los peregrinos, sino del mundo entero. Estamos todos los gallegos de celebración. Es una buena noticia, sobre todo teniendo en cuenta cómo está la situación, que como mucho en Semana Santa empezaremos a abrir, con lo que casi habremos perdido medio año”, explica a FARO.
“El miedo que tenemos es que hasta mayo o junio la cosa no empiece a funcionar”, añade.
En cualquier caso, destaca que este año no va a ser ni de lejos como los últimos, “porque no puede ser que la catedral esté llena de gente con lo que estamos pasando”. Con su habitual carácter optimista, subraya que “ese miedo que teníamos a la masificación, finalmente no lo vamos a tener”.
Lores recuerda que la única vez en la historia del Camiño de Santiago que se prorrogó un Año Santo fue en 1937, “por la guerra civil española”. “El Papa entonces anunció una prórroga para 1938, pero desgraciadamente la guerra duró un año más”, matiza.
De 14.000 a 2.500 pernoctas
Si la caída en el número de peregrinos ha sido importante en el conjunto del año, el de caminantes que pernoctaron en el albergue oficial de la Xunta en Pontevedra tampoco se ha quedado atrás. Tino Lores informa de que en 2020 durmieron en las instalaciones de la calle Ramón Otero Pedrayo, en las inmediaciones de las estaciones de autobuses y trenes, unos 2.500 peregrinos. Contrastan de forma importante con los 14.000 que lo habían hecho el año anterior, 2019.
El albergue continúa cerrado desde que se perimetró el municipio en el mes de noviembre. “No tenemos ánimo de lucro y quisimos evitar problemas”, apunta.
De igual modo, los numerosos albergues privados de la ciudad se mantienen en su mayoría cerrados y solo abren bajo demanda puntual de personas que puedan estar en el perímetro por cuestiones justificadas, tanto a nivel laboral como estos días por temas de reunión familiar por las fiestas navideñas.
Agosto y septiembre buenos
El año que acaba de concluir dejó, realmente, solo dos meses buenos en lo que a número de peregrinos se refiere. El mejor fue el de agosto, con 3.415 caminantes en la variante tradicional y 1.040 en la de la costa. En septiembre se registraron 2.093 y 505, respectivamente.
También julio y octubre sumaron, dentro de lo que cabe, cifras bastante atractivas para ser un año de pandemia. En julio pasaron por Pontevedra 2.129 en total y en octubre, 1.688. Para curiosidad, la cifra de noviembre, con solamente 62 caminantes.
Obras de mejora energética en el albergue oficial
El albergue “Virxe Peregrina” de Pontevedra iniciará en breve obras de acondicionamiento en su área más antigua, que ya supera los 20 años, para cumplir con los requisitos de eficiencia energética a raíz de las nuevas condiciones que debe cumplir por la pandemia del COVID y que supondrá la instalación de un circuito de calefacción de renovación del aire. El presidente de la Asociación de Amigos do Camiño Portugués, Tino Lores, colectivo que gestiona el albergue público de la Xunta, destaca que es el mejor momento para acometer estos trabajos aprovechando que las instalaciones continúan cerradas por la pandemia y el cierre perimetral. Hay que recordar que el albergue cuenta, además, con una nueva zona que lo dotó de una veintena de plazas más, por lo que con un total de un centenar es el más grande de la red oficial en la ruta portuguesa. La inauguración de la nueva área, anexa a la más antigua, tuvo lugar el pasado mes de agosto.
