Al menos tres profesionales de los equipos Covid que atienden a los enfermos de la pandemia en el Hospital Montecelo han dado positivo en el cribado que se ha realizado esta semana en el área sanitaria. Dos de ellos, según ha podido confirmar FARO, son médicos de Neumología.

“Podemos confirmar que hay tres casos y al menos uno más en cuarentena”, aseguraron ayer fuentes del servicio de Medicina Preventiva del Complexo Hospitalario de Pontevedra.

La Unidad de Prevención de Riesgos Laborales está cotejando la cifra final de profesionales en cuarentena, ya que se ha activado el protocolo Covid del áreas.

Los equipos están formados, básicamente, por especialistas de Neumología y Medicina Interna.

Ya en la primera ola de la pandemia llegaron a trabajar en esta enfermedad hasta cinco equipos de médicos en Montecelo porque se superó el centenar de pacientes ingresados.

“Tratar a pacientes Covid supone mucho desgaste físico y psíquico. Es una sobrecarga importante. Se nota a la gente más cansada”, manifestaba a este periódico hace unos días el jefe de Neumología del CHOP, el doctor Adolfo Baloira.

Actualmente hay 83 pacientes ingresados, cinco de ellos en la UCI. Además, ayer mismo se informó del fallecimiento de una mujer de 81 años que estaba en el Hospital do Salnés y procedía de la residencia Domus Vi de Ribadumia. Con ella son 42 las víctimas por la enfermedad en el área sanitaria.

Este brote llega sólo semanas después del registrado en Oncología del Hospital Provincial, que tras varios cribados llegó a afectar a medio centenar de profesionales y usuarios.

Continúan las restricciones

El brote se conoció en la misma jornada en la que, contra todo pronóstico, el comité de expertos de la Xunta en la pandemia de la Covid decidía dejar fuera al municipio de Sanxenxo de los cierres perimetrales que sufren las comarcas de Pontevedra y O Salnés pese a la mala evolución en las cifras de contagios y que cuenta ya con 72 casos activos. La villa turística se ha librado, al menos una semana más, de ser incluida en alguna de las dos áreas con restricciones especiales que la rodean. La decisión tomó por sorpresa a los propios vecinos y también a un sector que ya se temía lo peor, el de la hostelería, que podrá continuar con su actividad en los próximos días.

El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, especificó ayer en una rueda de prensa tras la reunión del comité clínico que no se endurecerán las restricciones en la joya turística de las Rías Baixas, si bien el municipio será sometido a “observación especial” debido al notable aumento de casos en los últimos quince días.

Y es que la evolución desde el 1 de noviembre, cuando comenzó a empeorar lo dice todo. Se pasó de 18 positivos activos entonces a los citados 72 actuales. Según Alertas Epidemiolóxicas, hay al menos siete brotes activos, uno de ellos con 14 positivos en una misma familia. Otro que destaca es el derivado de un evento funerario en un domicilio.

“Hay un goteo permanente de casos que nos va a hacer estar vigilantes y, en caso de que no haya una mejora clara, nos obligará a tomar decisiones y restricciones”, dijo, por su parte, la directora xeral de Saúde Pública de la Xunta, Carmen Durán. No será el único ayuntamiento bajo observación, ya que Chantada (Lugo) y A Rúa (Ourense) se hallan en una situación similar. En los tres se “intensificará la vigilancia”.

1.270 en el área sanitaria

En el conjunto del área sanitaria de Pontevedra y O Salnés hay actualmente 1.270 casos activos de Covid-19. El municipio con mayor cifra de infectados es el de Pontevedra, con 377, seguido del de Marín, que cuenta con 94. Sin embargo, el de Sanxenxo, con 72, ya tiene más enfermos que Poio, 67, que sí está incluido desde el inicio en el área de restricción perimetral.

De hecho, incluso cuando se aplicaron estas medidas, tanto Poio como Marín, con 52 y 65 casos respectivamente entonces, presentaban cifras menores que las actuales de Sanxenxo.

Son dos las áreas cerradas, en las cuales los vecinos solo se pueden mover en los concellos que las conforman. La de mayor superficie es la de nueve municipios de la comarca pontevedresa: Pontevedra, Marín, Poio, Vilaboa, Ponte Caldelas, Barro, Cerdedo-Cotobade, Campo Lameiro y Soutomaior. La otra es la que forman en O Salnés los de Vilagarcía de Arousa, Vilanova y Cambados.

La doctora Marina Varela Durán, del servicio de Anestesiología y Reanimación del CHOP y componente del comité clínico, destacó ayer en la misma rueda de prensa que todos los datos apuntan a una cierta estabilización a nivel general. “Ahora más que nunca debemos continuar manteniendo la vigilancia activa, las medidas de control de transmisión del Covid y a la población alerta”, resumió.

Insistió en la necesidad de llevar a cabo esa vigilancia especial en Sanxenxo.

Telmo Martín apela a la responsabilidad y solidaridad de los vecinos de Sanxenxo

El alcalde de Sanxenxo, Telmo Martín, no quiso entrar a valorar ayer la no entrada del municipio en las áreas de restricciones porque “no es una cuestión que nos toque valorar a nosotros, sino al comité clínico de expertos”. “Lo que sí puedo decir es que en el gobierno local, dentro de nuestras posibilidades, estamos tomando todas las medidas posibles para reducir los casos que siguen, lamentablemente, creciendo”, indicó. “Vivimos momentos complicados, pero hago una llamada a la responsabilidad y a la solidaridad de los vecinos de Sanxenxo”, pidió el regidor. Por lo de pronto, en la villa la hostelería continuará abierta y se permiten las reuniones sociales hasta seis personas (no necesariamente convivientes). Asimismo, se mantienen las medidas de prevención y vigilancia establecidas desde el gobierno local para evitar la expansión de la pandemia. Entre otras cuestiones, el Concello suspendió, hasta nuevo aviso, toda actividad sociocultural en el término municipal para reducir al máximo los riesgos de contagio y el número de casos.