A las 4.00 horas de la madrugada del pasado jueves, la tubería de fibrocemento de uno de los cinturones de agua que recorre la ciudad y que más capacidad tiene reventaba con consecuencias fatales para los comercios situados frente al lugar donde tuvo lugar la brecha.

Si bien un particular daba parte a la Policía Local, quien posteriormente procedió a comunicar el incidente a Viaqua para que cortara el suministro en la zona, los propietarios de los establecimientos afectados no supieron lo que había sucedido hasta el entorno de las 9 horas, cuando al llegar a sus negocios se encontraron con el agua hasta los tobillos y miles de euros en pérdidas a primera vista.

Con respecto a la posible causa de la rotura de la tubería, desde el Concello de Pontevedra, la concelleira del Ciclo da auga, Carme da Silva, apuntó que bien se pudo deber a la antigüedad del conducto o bien a que una oscilación de la presión provocó que reventara la canalización.

La Administración local permanece a la espera de la evaluación de los daños por parte de los técnicos municipales para ver qué decisión se toma al respecto de esta red de agua.