Como ocurre con cada intervención policial que se desarrolla en el poblado de O Vao, numerosos vecinos se arremolinaron en la zona en la que los agentes estaban practicando los registros. Además, en esta ocasión, la intervención policial coincidió con la indisposición de un vecino del asentamiento al que le dio un infarto y acabó falleciendo de camino al hospital. Esto caldeó los ánimos de los vecinos del poblado que culpaban del fallecimiento de esta persona al "susto" que se llevó por el ruido que generó la intervención policial en el poblado. Esto fue desmentido desde la Comisaría Provincial quienes explican que el hombre se encontraba en una chabola del poblado ajena al punto en el que se estaban llevando a cabo los registros y que su indisposición se produjo antes de que se iniciase la actuación policial. En un momento dado, los vecinos volvieron a amenazar y a increpar gravemente a los periodistas que tomaban imágenes de los registros y las detenciones.