El Concello centró en los últimos meses sus actuaciones en materia forestal en el diseño de parques en montes del municipio, con dos proyectos ya elaborados, aunque no ejecutados. En A Fracha, entre Tomeza, Marcón y A Canicouva, y en Monte Tomba, en Campañó, que sumarían cerca de 500 hectáreas.

El proyecto de A Fracha ocupa 406 hectáreas (110,72 en Marcón, 36, 88 en Tomeza y 258 en A Canicouva) y establece 26 kilómetros de sendas, con la plantación inicial de unos 6.500 árboles, especialmente robles y castaños. La entrada al parque será por el aparcamiento en Outeiro Navío, donde llegan las vías asfaltadas. Se ubica en Marcón, con acceso rodado desde el polígono de O Campiño, y en ese punto ya existe desde hace años un área de descanso habilitada en su día por los comuneros de la parroquia.

Esta primera actuación supondrá una inversión de 604.794,23 euros y tiene un plazo máximo de ejecución de un año. El presupuesto total del proyecto y de 2.704.794,23 euros ya que hay que sumar 60.000 euros anuales de mantenimiento.

Los comuneros ceden el uso de sus propiedades durante 35 años si bien mantienen el aprovechamiento forestal de todo el recinto.

En Campañó la comunidad de montes de Campañó puso 62 hectáreas del futuro parque periurbano de A Tomba a disposición del Concello. En este caso se plantea la creación de más de quince kilómetros de sendas peatonales por un ámbito que acumula elementos patrimoniales que se pondrán en valor con una inversión de unos 441.000 euros.

En una primera fase tras la tramitación administrativa, se procederá la limpieza y eliminación de especies invasoras y la preparación de las pistas y sendas. La segunda fase será la de plantación. Los comuneros cederán los terrenos por un tiempo inicial de 30 años y la idea era plantar 22 hectáreas de bosque de castaños, 20 de frondosas (castaños y robles), tres de olivos y 15 hectáreas de bosque mixto, así como habilitar un mirador sobre la ciudad en la parte alta.