El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, eligió un foro con empresarios de Pontevedra y su comarca para realizar sus hasta ahora declaraciones más concretas sobre el apoyo a la continuidad de Ence. En una sala en la que también estaba el director de la planta de Lourizán defendió el mantenimiento de la factoría en su actual ubicación, dejando en manos de los técnicos el único 'pero': el de que se determine o no la concurrencia de "las máximas garantías medioambientales". El titular autonómico estimó que la pastera "supone más del 10 por ciento del Producto Interior Bruto en una ciudad con un paro del 30 por ciento". Y tras ello subrayó: "No podemos abandonar una posibilidad para crear riqueza".

El mandatario autonómico incidió en esos datos. "Desde el punto de vista político tenemos claro lo que queremos: queremos empleo en Pontevedra", expuso, reduciendo a una decisión de los expertos no políticos el sentido en el que irá el dictamen ambiental que la Xunta de Galicia enviará en su momento al Gobierno central para que éste decida si el complejo industrial sigue o no junto a la ría a partir del año 2018. "En el punto de vista ambiental tendrán que ser los técnicos los que nos digan si se cumplen o no los parámetros medioambientales", aseguró, recalcando que "la empresa tendrá que acreditar y garantizar que cumple taxativamente todas las cuestiones ambientales que se le soliciten".

El peso económico de la pastera en la comarca y los trabajos que genera son para el presidente gallego, junto al cambio legislativo aprobado por el PP y que abre la puerta a la permanencia de Ence y otras empresas que se ubican sobre dominio público, los argumentos que le llevan ahora a hablar más abiertamente de la posibilidad de que la Administración autonómica apoye de manera oficial la perpetuación de este recinto en Lourizán. Y, eliminando cualquier opción de un eventual traslado, reduce a dos las posibilidades de futuro: "En la realidad actual hay dos opciones: o la Xunta dice que Ence se vaya o Ence acredita las máximas garantías medioambientales y se queda". A continuación, expuso: "Ésta es la situación como está; yo creo que honestamente tengo que trasladárselo así a la sociedad civil y, cómo no, empezar haciéndolo en Pontevedra". Unas palabras que pronunció ante el director de la planta de Lourizán, Antonio Casal, así como otros empresarios de la comarca y colectivos que en los últimos meses han recalcado su explícito apoyo a la continuidad de la fábrica como Aempe, AJE o la Plataforma Proindustria. También estaba el candidato del PP a la alcaldía de Pontevedra, Jacobo Moreira, quien hace solo unas semanas anunció el giro de 180 grados dado por el partido en la ciudad con respecto a cuatro años antes, pasando de pedir el traslado del recinto a abogar por su continuidad.

Feijóo respaldó pocos días después el cambio de opinión de los populares en Pontevedra, justificándolo con una frase que volvió a repetir ayer en su cita con los empresarios. "Ence es en Pontevedra como PSA Citroën en Vigo, Inditex en Galicia o el sector naval en Ferrol". Por ello, entiende que la continuidad de la fábrica de celulosa debe afrontarse "con rigor y realismo", recalcando de nuevo que debe tenerse en cuenta "la situación" actual.

Por otro lado, anunció su disposición a abrir en el Parlamento un debate sobre la continuidad de Ence en Pontevedra. "Nosotros abriremos un debate en el Parlamento de Galicia con el resto de las fuerzas políticas para ver cual es su opinión", afirmó el presidente. Esta discusión se llevará a cabo, por tanto, en la misma cámara en la que Feijóo y el resto del grupo parlamentario del PP votaron en 2010 a favor del traslado de la pastera a pesar de que ya había crisis y crecimiento del paro en Pontevedra. El acuerdo entonces fue unánime de todos los grupos políticos.