Mantener la "tradición" y convocar la Marcha anual anti-Ence en el mes de junio o adelantar la cita lúdico-reivindicativa para antes de las elecciones municipales del 27 de mayo con el fin de que los políticos, todos los políticos, retengan en la memoria y en la retina el rechazo social de los pontevedreses a la permanencia del complejo industrial de Lourizán. El dilema planteado por la junta directiva de Defensa da Ría quedó ayer sin resolver en la asamblea anual de la asociación, que sí bien estuvo de acuerdo en adelantar la cita para antes de los comicios, no lo estuvo a la hora de respaldar la fecha propuesta de la dirección: el sábado, 12 de mayo.

"Queríamos que fuese antes de las elecciones, antes del inicio formal de la campaña, ya que queremos que se tenga en cuenta nuestra opinión" explicó Antón Masa, el reelegido presidente de la asociación. Un pronunciamiento que fue rebatido desde la asamblea, que puso en entredicho la oportunidad de la fecha y planteó como alternativa el día 5 de mayo.

Unos y otros se comprometieron a analizar los pros y contras de ambas posturas y a consensuar en los próximos días una fecha definitiva para la marcha.

Ayer también fue tiempo de balance y de proyectos. Entre estos últimos los ecologistas han decidido retomar su campaña "2018, agora", un lema con el que sintetizan su reivindicación básica: el desmantelamiento inmediato de Ence, sin esperar a que expire el plazo de concesión de los terrenos que ocupa en dominio marítimo.

Por otra parte Defensa da Ría pedirá a los responsables de la consellería de Medio Ambiente que les aclare si Ence ha solicitado o no la autorización ambiental integrada, que manda la ley de prevención de la contaminación y si es así quieren conocer en que situación se encuentra su expediente.

Los asistentes a la asamblea calificaron de "hito" la decisión de Medio Ambiente de archivar la solicitud de autorización ambiental presentada por Elnosa, planta de cloro que comparte el recinto fabril de Lourizán con Ence y aplaudieron al Concello por emitir el informe urbanístico desfavorable que argumenta dicho archivo. Defensa da Ría comparte con el gobierno local la tesis de que Elnosa tiene los días contados y esa cuenta finaliza el próximo 30 de octubre.