La cercanía también vende en la Plaza de Abastos: “Aquí vengo y saben mi nombre”

La Plaza de Abastos acoge desde ayer la campaña “Quere o teu mercado”, una iniciativa internacional que en Galicia está dirigida por la Dirección Xeral de Comercio. La programación incluye oferta gastronómica y cultural, y pretende poner en valor el papel de los mercados tradicionales en la vida social y en la economía de proximidad. “Se trata de mostrar la importancia social que tienen estos espacios en las sociedades actuales. Aquí la gente viene, habla, convive. Y por otro lado, la relevancia como reservorio de productos locales que promocionan una dieta saludable”, explica Alberto González, gerente de la Plaza.

La campaña se lleva a cabo en 28 mercados de toda Galicia. En el caso de Ourense, los clientes del recinto comercial podrán degustar hoy ternera gallega con pan de Cea, además de disfrutar de actuaciones musicales y recital de poesía sobre la cocina tradicional.

“Vengo desde hace 30 años”

La Plaza de Abastos recibe cada día a cientos de ourensanos que deciden apostar por el producto local. “Yo vengo aquí desde hace 30 años porque el producto está rico, la gente es agradable y hay muy buenos precios”, asegura Concepción Sampedro, vecina de la avenida de Zamora. “A veces vengo caminando, y otras en bus”, señala. Carmen Rodríguez también es una de las habituales desde hace décadas. “Yo vengo porque me queda cerca, pero también porque pienso que aquí los productos están más frescos que en los supermercados, son más de proximidad y hay más variedad”, destaca.

Para Marina Diz, uno de los principales valores de la Plaza es el trato cercano de los comerciantes. “A mí me encanta este ambiente, yo vengo todos los días y me saludan por mi nombre. Son pequeñas cosas que se valoran mucho, por eso animo mucho a la gente a que venga aquí a comprar. Además, el producto está muy bueno”, valora.

Aumento de clientes

Desde 2020, la clientela del recinto comercial se ha incrementado. “Primero, durante la pandemia, y después, a raíz de la inflación. Vemos que cada vez somos más competitivos, somos un circuito corto de comercialización, no es necesario utilizar tanta energía. Creo que la gente tiene cada vez más percepción del valor de lo local”, explica Alberto González.

El perfil del comprador es variado, aunque abundan las familias. “Vemos que hay un punto de inflexión cuando tienes hijos porque tienes la percepción de que debes darle una alimentación más sana, y ahí es cuando se engancha mucha gente joven. Tenemos muchos carritos paseando por el mercado”, asegura. En ese sentido, desde la Plaza se organizan a lo largo de todo el año diversas actividades destinadas al público infantil, como talleres de cocina o visitas guiadas al recinto.

La localización del espacio comercial, en el centro de la ciudad, también favorece la proliferación de turistas, que entran en la Plaza y compran productos gastronómicos típicos como quesos o pan. “Es cierto que tenemos mucho mercado para crecer en cuanto a turismo”, reconoce González.

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