“Sí, quiero” en las aulas de FP

Estudiantes del instituto de Vilamarín coordinaron la organización completa de una boda con ceremonia, cóctel y banquete

Los novios durante la ceremonia nupcial celebrada en el CIFP Vilamarín.

Los novios durante la ceremonia nupcial celebrada en el CIFP Vilamarín. / Iñaki Osorio

Decenas de alumnos de ciclos formativos de Formación Profesional que se imparten en Ourense colaboraron en la organización de una boda que se celebró este jueves en el CIFP Vilamarín a modo de lección práctica sobre la organización de eventos en la que no faltó ningún detalle. Desde el diseño de las invitaciones a la colocación de los invitados pasando por la elaboración del menú, el cóctel, el peinado de los novios y padrinos, la ambientación musical, el trabajo fotográfico, la grabación de vídeo y el detalle de regalo. Todo a cargo de estudiantes de tres institutos unidos para dar un “sí, quiero” muy real.

Una boda no se organiza de un día para otro y de eso son plenamente conscientes los alumnos del ciclo superior de Gestión de Alojamientos Turísticos del CIFP Vilamarín, que ayer celebraron una ceremonia nupcial en el instituto que dio por finalizada y con éxito una práctica formativa que arrancó en diciembre y que ha implicado a estudiantes de numerosas titulaciones e incluso de otros centros educativos de la ciudad.

Grupo de estudiantes organizadores.

Grupo de estudiantes organizadores. / Iñaki Osorio

El coordinador del evento es el estudiante Álex Calviño, que reconoce que han vivido “con mucha emoción” todo el proceso. “Es muy laborioso y llevamos trabajando en esto desde diciembre, aunque esta última semana ha sido la más complicada”, apunta, satisfecho también de haber logrado un final feliz para esta boda. “Lo conseguimos todos juntos”, enfatiza.

En todos se incluyen alumnos de muy diversos ciclos formativos que se imparten en el CIFP Vilamarín, un centro muy enfocado a la familia de la hostelería y el turismo. Los coordinadores son los estudiantes de 1º y 2º curso de Gestión de Alojamientos Turísticos, que se encargaron de toda la organización del evento, empezando por el diseño de las invitaciones que fueron enviadas, entre otros, a autoridades académicas y políticas del ámbito de la educación.

Quinteto de cuerda formado por alumnos del Conservatorio de Ourense.

Quinteto de cuerda formado por alumnos del Conservatorio de Ourense. / Iñaki Osorio

La práctica implicó también al alumnado de Dirección de Cocina, Cocina y Gastronomía, Servicios de Restauración y Panadería, Repostería y Confitería, que se encargaron del diseño y elaboración del menú, y del servicio en el cóctel y el banquete posterior a la ceremonia. A los novios y padrinos los peinaron y maquillaron estudiantes del ciclo de Peluquería y Estética del IES 12 de Octubre, y de la ambientación musical y el reportaje fotográfico y audiovisual, los alumnos de Imagen y Sonido del CIFP A Farixa.

Alumnado de hostelería preparó y sirvió el cóctel.

Alumnado de hostelería preparó y sirvió el cóctel. / Iñaki Osorio

La recreación de la boda respetó todos los detalles, incluidos los arreglos florales y el obsequio de la novia a los invitados. Tampoco escatimaron en platos, con una carta de 12 aperitivos en el cóctel y un menú con dos entrantes de marisco, primer y segundo plato, postre y tres tipos de pan elaborados también por los alumnos de Panadería.

“Llevamos varios meses trabajando en esto, pero el día de la boda ha sido el más emocionante y frenético. Como alumnos valoramos que esta experiencia es muy interesante porque es una práctica real en la que puedes ver los errores y qué aspectos mejorar”, señala Lorena Rodríguez, alumna de Gestión de Alojamientos Turísticos.

Los cortadores de jamón también realizaron su práctica.

Los cortadores de jamón también realizaron su práctica. / Iñaki Osorio

La profesora de Eventos, Rocío Pérez, pone el acento en la “calidad superior” que este tipo de prácticas aportan a la FP. “Hemos cuidado hasta el último detalle, y lo que haremos ahora es sentarnos y analizar todo lo que ha pasado, los errores, problemas de última hora y qué se podría mejorar. De esos fallos se aprende y no les volverán a pasar”, apunta.

La boda duró cuatro horas desde la ceremonia a la finalización del banquete, y contó con la actuación de un quinteto de alumnos del Conservatorio de Música de Ourense.

Equipo de imagen del CIFP A Farixa.

Equipo de imagen del CIFP A Farixa. / Iñaki Osorio

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