Los anfitriones de la ciudad

Son anfitriones de las ciudades y espacios naturales y su cometido es introducir al visitante en sus rincones emblemáticos, comunicarse en su lengua y brindar experiencias enriquecedoras. “Los guías de turismo vivimos de esto y queremos visibilizar una profesión que en ocasiones no es muy valorada”, apunta Rosa Dorado, una de las muchas profesionales que este miércoles conmemoró el Día internacional del Guía de turismo sumándose a una iniciativa de la Asociación Profesional de Guías de Turismo de Galicia que consistió en realizar visitas solidarias en las ciudades en las que el colectivo tiene delegación.

En el caso de Ourense, la actividad estuvo coordinada por Pepe Mosquera y partió de los Xardíns do Padre Feijoo a las 11.30 horas. El “Paseo pola vella Auria” congregó a unas 70 personas que aportaron un donativo, al igual que en el resto de ciudades, que se destinará a la Federación de Asociacións de Familiares e Persoas con Enfermidade Mental de Galicia.

Identificados por sus paraguas amarillos, los guías ofrecieron una visita de una hora y media por el casco histórico con paradas en la Praza Maior, As Burgas, Praza da Magdalena y entorno de la Catedral finalizando con la observación de la fachada del templo. “Participaron ourensanos y estudiantes y lo que más suele gustar en actividades como esta es ver que su ciudad está puesta en valor, les hace sentir orgullosos”, señala Dorado. Con esta visita, el colectivo aprovechó para reivindicar su oficio y demostrar que “los guías profesionales somos los mejores embajadores de nuestra tierra”.

Los guías quisieron así dar visibilidad a una actividad que, por desarrollarse en un contexto de ocio “parece que no es un trabajo, pero no hay nada más serio que gestionar el ocio de los demás”, destaca Rosa Dorado. “Tenemos que demostrar conocimientos de lengua, de comunicación, de legislación, una cultura general y mucha responsabilidad”, concluye.

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