El número anual de hospitalizados en Ourense equivale al 11,5% de la población

Ingresan 35.000 personas cada año y la estancia media es de 8 días | Tras el alta, los pacientes reciben una encuesta por SMS para poder evaluar el trato, el control del dolor, la limpieza o la comida

Profesionales sanitarios, a las puertas del hospital de Ourense. |   // BRAIS LORENZO

Profesionales sanitarios, a las puertas del hospital de Ourense. | // BRAIS LORENZO / J. F.

J. F.

Ourense es la provincia con la media de edad más elevada de España, junto a Zamora, y en la que un tercio de los habitantes tiene 65 años o más. El envejecimiento influye en que haya un perfil de paciente crónico y pluripatológico, más expuesto a requerir un ingreso hospitalario. Cada año, unas 35.000 personas tienen que quedarse en alguno de los tres hospitales de la red pública del Sergas en Ourense –el CHUO y los comarcales de Verín y O Barco de Valdeorras–.

El número equivale al 11,5% de la población residente de la provincia, unas 304.000 personas. La estancia media de los pacientes hospitalizados es de 8 días.

El ingreso es una decisión de los facultativos cuando la atención de los pacientes no puede ser ambulatoria. Siete de cada diez hospitalizaciones se deciden en los servicios de Urgencias. El 30% de los casos restantes son ingresos programados, sobre todo para intervenciones quirúrgicas.

“El impacto asociado de preocupación por la salud perdida y también por la incertidumbre provoca una percepción de vulnerabilidad y de dependencia que, en algunos casos, complica el proceso de recuperación”

Un ingreso afecta a la vida de los pacientes y también de sus familiares, por la preocupación asociada y la organización del tiempo que es necesaria para el acompañamiento en el centro, en los casos de personas hospitalizadas que cuentan con allegados que puedan o quieran.

“El impacto asociado de preocupación por la salud perdida y también por la incertidumbre provoca una percepción de vulnerabilidad y de dependencia que, en algunos casos, complica el proceso de recuperación”, asegura el Sergas.

Personal sanitario en el CHUO, en una imagen de archivo.

Personal sanitario en el CHUO, en una imagen de archivo. / INAKI OSORIO

Los procedimientos diagnósticos y terapéuticos, así como los cuidados que prestan los distintos profesionales sanitarios buscan recuperar la salud perdida, o al menos mitigar el deterioro. Existen métodos para evaluar la calidad de las prácticas asistenciales en los propios servicios y unidades. Además, cada vez es más habitual una evaluación por parte de comités interdisciplinares, que miden los resultados de las actuaciones e introducen las mejoras pertinentes.

Este control estaría “cojo”, cree el Sergas, sin que los pacientes pudieran opinar también sobre la atención recibida durante su proceso. La Unidad de Calidad del área sanitaria de la provincia de Ourense implantó en mayo una estrategia de evaluación de la calidad percibida por los pacientes que estuvieron ingresados, con el fin de aplicar las mejoras pertinentes.

Una de las cuestiones que pueden evaluar los pacientes tras el alta es su opinión sobre la comida.

Una de las cuestiones que pueden evaluar los pacientes tras el alta es su opinión sobre la comida. / FdV

Siete días después del alta, las personas reciben en el móvil un SMS con un enlace a una encuesta de satisfacción, con diez preguntas sobre el trato, la comodidad de las instalaciones, la tranquilidad, la posibilidad de tener compañía, la comida, la limpieza, la información, la disposición de los profesionales a escuchar, el respeto a la intimidad por parte del personal y el control del dolor.

La interfaz de la encuesta que reciben los pacientes siete días después del alta.

La interfaz de la encuesta que reciben los pacientes siete días después del alta. / FdV

Hay una pregunta final de satisfacción global, así como un campo de comentario abierto para observaciones del paciente.