Ourense estrena sus primeras rampas mecánicas en la calle Concordia

Comenzaron a funcionar a las 9 de la noche de ayer, 13 meses después del inicio de las obras y en plena campaña electoral

Varios usuarios, durante la puesta en marcha, ayer, de las rampas de Calle Concordia.

Fernando Casanova / Edgar Melchor

R. O.

A las 9 de la noche de ayer, sin previo aviso y después de 13 meses de obras con el tráfico cortado, y una inversión de seis millones de euros, comenzaban a funcionar en calle Concordia, en el centro urbano, las primeras rampas mecánicas de la ciudad, en una ambiente de curiosidad entre los viandantes.

La obra más discutida por los grupos de oposición, porque Concordia no es la calle con mayor desnivel de la ciudad, y por su alto coste, comenzó a construirse en abril del pasado año, dentro de los proyectos del Ourense Vertical del alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, que incluye cerca de una docena de proyectos repartidos por centro y varios, tanto elevadores como de rampas mecánicas.

En este caso, el primer proyecto de movilidad vertical que entra en funcionamiento en Ourense es este de Concordia, que debería de haberse puesto en marcha ya hace varios meses, pero ha sufrido imprevistos técnicos, que obligaron incluso a hacer un nuevo añadido de 700.000 euros al proyecto inicial, que lo que provocó que la obra superase los 6 millones de inversión.

No hubo ningún acto de inauguración oficial, al realizarse la puesta en marcha de estas rampas mecánicas, en plena campaña, y con la prohibición expresa de realizar exhibición o promoción de logros y obras realizadas, pero si que, entre los primeros usuarios que estrenaron este sistema mecánico, estaba el propio alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, y varios miembros de su gobierno actual, así como varios de los aspirantes que forman parte de la nueva candidatura de Democracia Ourensana, al Concello.

Desde abril de 2022, y hasta ayer mismo, Concordia ha sido sometida también cambios de infraestructuras se han suprimido los árboles, al igual que en San Lázaro, para sustituirlos por grandes jardineras. Las rampas son solo de subida y unen la calle Concordia, desde su confluencia con Progreso, en su tramo inferior, hasta las proximidades de la Plaza de As Mercedes donde remata el último tramo mecánico.