La Fundación San Rosendo recuperó la celebración presencial de su patrón en Laias después de tres años de suspensión por el Covid19. Bajo el lema ‘Celebrando el reencuentro para dar vida a los años’, el evento reunió a 1.000 trabajadores de los 73 centros que la entidad tiene en las 4 provincias gallegas. El 30% de ellos asistieron por primera vez a esta celebración, ya que son trabajadores que se han incorporado a la organización en los últimos 3 años.
El encuentro incluyó varios momentos cargados de emoción. Además del reencuentro de profesionales, se celebró un oficio religioso en homenaje a las víctimas del coronavirus y trabajadores y patronos fallecidos en los últimos años. También se entregaron las medallas de la Fundación San Rosendo a los empleados jubilados desde 2020. Un total de 94 profesionales recibieron este reconocimiento que despertó la emoción y cariño de todos sus compañeros.
El presidente de la entidad, José Luis Gavela, agradeció a los trabajadores su “dedicación y esfuerzo, sobre todo, en la última etapa profesional durante los años de Covid19”. También tuvo un sentido recuerdo para las personas fallecidas durante la pandemia “su memoria sigue con nosotros” y envío un mensaje de cariño para sus familias.
La jornada incluyó espacios de reflexión a través de reuniones de directores de centros, del equipo médico y propio Patronato de la Fundación San Rosendo.
El acto finalizó con una cena popular y música en directo en la explanada del Hotel Balneario Laias Caldaria, en la que participaron invitados colaboradores de la organización, proveedores y representantes de distintas administraciones.
La entidad cuenta con 73 centros asistenciales en Galicia: 60 para personas mayores, 11 para personas con discapacidad, uno para el tratamiento del alcoholismo y otro centro de inclusión. En total suman 3.872 plazas de las que el 24,3% son concertadas. El equipo de profesionales se ha incrementado y asciende a 2.075 trabajadores, un 6,8% más que el año anterior.
Además, el 89% de los centros están ubicados en el ámbito rural, donde la oferta es escasa por presentar la población una mayor atomización.