Desmantelan un grupo criminal dedicado al cobre que dejó a varias aldeas sin teléfono

Cometían los robos en zonas rurales muy aisladas, tras vigilancias previas, y usaban vehículos para derribar los postes y llevarse los cables del tendido

En la operación se han intervenido 700 metros de cable.

En la operación se han intervenido 700 metros de cable. / Guardia Civil

R. O.

Cuatro personas, residentes en Verín y Lugo, formaban presuntamente un grupo criminal dedicado al robo de cables de cobre del tendido telefónico. En la bautizada como operación Cuprum, agentes de la Guardia Civil de Verín y Vilar de Barrio detuvieron este miércoles a los presuntos ladrones.

El instituto armado da por esclarecidos, por el momento, ocho hechos delictivos, cometidos principalmente en tendidos telefónicos de los municipios rurales de Oímbra, Sarreaus, Laza, Riós y Villardevós.

En la operación se han intervenido dos cizallas de corte, una furgoneta utilizada para el transporte de los efectos robados, así como unos setecientos metros de cable del tendido aéreo del teléfono.

La investigación se inició tras las primeras denuncias, recibidas a mediados de este año, en las que la Guardia Civil constató que se habían producido numerosos robos de cable telefónico en varias localidades de la provincia de Ourense. Los agentes iniciaron una línea de investigación centrada en la localización de los posibles autores de estos hechos, que causaron un perjuicio económico pero también social, al dejar a varias aldeas sin comunicación telefónica hasta que el tendido era restituido.

Material incautado por la Guardia Civil.

Material incautado por la Guardia Civil. / GC

Fruto de estas investigaciones, la Guardia Civil localizó enseguida los diferentes vehículos que eran utilizados para derribar los postes telefónicos y posteriormente, para el transporte de los efectos sustraídos.

El grupo criminal estaba “perfectamente sincronizado” para materializar los robos en zonas muy aisladas, donde los autores habían realizado labores de vigilancia en los días previos, con el objetivo de conocer la ubicación y estructura de los tendidos telefónicos.

La Guardia Civil admite que los daños a la población fueron relevantes, “debido a la demora para reparar los estragos ocasionados”. Además, el perjuicio económico ha sido “considerable”, sin detallarlo.

En libertad

Los cuatro detenidos, los efectos recuperados y las diligencias policiales instruidas fueron puestas a disposición del Juzgado de Instrucción 1 de Verín. Los cuatro investigados quedaron en libertad provisional, pero se les ha impuesto, como medida cautelar para minimizar el riesgo de fuga, la obligación de comparecer periódicamente en el juzgado.