Michinel, único representante europeo en el congreso de óptica y fotónica que se celebra en Japón

El catedrático de Óptica, Humberto Michinel, participó la pasada semana en el congreso anual Optics and Photonics que se celebra en Japón. El investigador ourensano y director de la Escola de Enxeñaría Aeronáutica e do Espazo del campus de Ourense fue el único representante europeo en el panel de ponencias de esta edición, que se desarrolló durante cuatro jornadas en la ciudad de Utsonomiya, cerca de Tokio.

El evento, relata Michinel, se centró en los últimos avances en óptica y fotónica, con un programa que abordó “desde los nuevos sistemas de comunicaciones por fibra óptica a las innumerables aplicaciones de los láseres en campos que van desde la biomedicina al aeroespacial, entre otros muchos”.

El experto ourensano, que fue presidente de la Sociedad Europea de Óptica entre 2018 y septiembre de este año, impartió una de las cuatro charlas plenarias inaugurales, dedicada a las estructuras fotónicas topológicas.

Desde los agujeros negros a los sistemas cuánticos no lineales

Es un ámbito, indica, “en el que se exploran distintas aplicaciones de los líquidos de luz -que en su día descubrimos en Ourense-, y su relación con diversos campos de la física, desde los agujeros negros a los sistemas cuánticos no lineales”.

Explica que la topología es una rama de las matemáticas que se suele denominar “geometría de las cosas elásticas” y que trabaja con las propiedades de los objetos que tienen agujeros. “Los agujeros son muy importantes en fotónica; se asocian con que en medio de un campo con forma de luz, hay una zona oscura con una propiedad que se llama carga topológica en la que pueden suceder cosas interesantes desde el punto de vista de dispositivos”, detalla el investigador. “Digamos que esos agujeros oscuros, cuando hay muchos dentro de un fondo de luz, que sería líquido de luz en este caso, ejercen entre ellos fuerzas que son como cargas eléctricas, y eso le da unas propiedades muy interesantes”.

En esta línea de investigación que Michinel inició hace más de dos décadas y que tuvo como hito el descubrimiento en 2002 de la luz líquida, trabaja actualmente con Ángel Paredes y José Ramón Salgeiro, compañeros del grupo de Ingeniería Física. “Se sabe que estos agujeros existen en los líquidos cuánticos, de manera que esto sería una demostración más de que la luz, en ciertas condiciones se comporta como un líquido cuántico”, apunta.

Destaca que “esas señales oscuras se pueden usar para introducir información”, por lo que esta investigación está orientada a los dispositivos fotónicos y el uso de la luz como herramienta para la transmisión y el procesado de información.

Reconocimiento a la investigación del campus de Ourense

El investigador y profesor de Física en el grado de Ingeniería Aeroespacial señala que la invitación al congreso de Japón “es un gran honor” y también “un reconocimiento a la investigación que hacemos en el campus de Ourense”.

"Es una idea en la que se sigue trabajando y los experimentos han ido demostrando que nuestra teoría era correcta”

Precisamente se cumplen 20 años desde el descubrimiento dirigido por Michinel que demostraba que la luz podía licuarse. La teoría se publicó en la Physics News, una de las revistas de Física más relevantes, y se convertía en uno de los hallazgos científicos más importantes del año 2002. “En 2005 publicamos otro artículo en el que demostrábamos que la invisibilidad cuántica se podía utilizar para conseguir la luz líquida y un grupo de EEUU hizo el experimento en 2013. Es una idea en la que se sigue trabajando y los experimentos han ido demostrando que nuestra teoría era correcta”, señala.

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