La reforma de la rotonda de Mariñamansa rendirá homenaje a todos aquellos trabajadores que combatieron, y siguen combatiendo, la pandemia del COVID-19 desde la primera línea. La glorieta, próximas al edificio de hospitalización del CHUO en el que todavía se libra esta batalla, lucirá con agua y color en reconocimiento a su esfuerzo.

Así lo anunció el concejal de Medio Ambiente, Jorge Pumar, que presentó el proyecto, que suma una inversión de 48.360 euros. El diseño, explicó, consiste en una arquitectura acuática con nuevos elementos hidráulicos y lumínicos en homenaje “a todos aquellos profesionales que están a nuestro lado, haciendo una enorme labor, durante toda la pandemia” Además, señala, este diseño “nos recordará a todos, en el futuro, la labor de aquellos que desinteresadamente arriesgaron y arriesgan mucho por ayudarnos”.

Las actuaciones incluyen la instalación de arquitectura acuática, con la incorporación de una tobera principal compuesta por 24 surtidores parabólicos inclinados que conformarán una atractiva corona que puede alcanzar los 3 metros de altura. En el centro del estanque inferior, se instalará una columna de espuma, compuesta por 72 salidas verticales capaces de crear una gran columna de espuma de hasta 2,5 metros de altura.

La instalación hidráulica se renovará de forma completa, incorporando 5 nuevas bombas sumergidas, un nuevo equipo de depuración mediante filtro de arena y un nuevo dosificador de cloro.

La reforma lumínica permitirá la adaptación de las luminarias a los nuevos criterios de sostenibilidad con el nuevo equipamiento de lámparas led RGB, que incorporan proyectores de acero inoxidable. Esta instalación se complementará con la renovación integral del cuadro de mando del conjunto de la rotonda.