Un guion de serie para este caso al que se ha enfrentado la Policía Nacional de Ourense. Lo que comenzó como la típica historia de avispados que se aprovechan de la excesiva generosidad nocturna de un hombre de familia acaudalada ha acabado con dos personas detenidas por extorsión, tras hacerse presuntamente con miles de euros de la víctima. En la mitad de la trama, el extorsionado sufrió un ictus que le dejó en silla de ruedas y le provocó problemas de memoria.

La Policía Nacional tuvo conocimiento de los hechos el pasado 18 de octubre, cuando dos personas acudieron a comisaría y dijeron ser conocedores de un delito que estaba sufriendo un amigo, que no se atrevía a denunciar por miedo futuras represalias.

Según su relato, su amigo es una persona que gracias al patrimonio familiar poseía un elevado poder adquisitivo y "hacía ostentación del mismo durante su disfrute del ocio nocturno". Solía pagar consumiciones de "alcohol y demás" a sus acompañantes, por lo que se acercó a él gente diversa que se aprovecharon de su generosidad en beneficio propio. En esas circunstancias entabló amistad con varias personas originarias de Rumanía, a las que mostró su patrimonio familiar.

En agosto de 2019, el hombre sufrió un ictus que le provocó una hemiplejia lateral izquierda, sufriendo una pérdida de memoria y siendo internado durante seis meses en un centro de rehabilitación. Durante su estancia en dicho centro, explica la Policía Nacional, la familia se percató de que sus tarjetas bancarias estaban siendo utilizadas por terceras personas, con gastos de 33.000 euros, pero no formularon denuncia y se limitaron a cancelarlas. Debido a la pérdida de memoria no se pudo determinar las circunstancias en que obtuvieron las tarjetas.

Espiral sin fin

Cuando recibió el alta quedó impedido en una silla de ruedas, pero comenzó a hacer una vida normal y empezó a recibir mensajes, desde un número que no conocía, de un hombre que le decía que tenía una deuda con él de 2.400 euros. El hombre amenazaba con matarle si no saldaba la supuesta deuda; debido al temor que sufrió y a que no recordaba nada optó por pagarle.

Pero nuevamente recibió llamadas y mensajes amenazantes pidiendo más dinero. De nuevo accedió a pagar, lo que le llevó a "una espiral sin fin", hasta el punto de pasar a pedir a continuación bienes inmuebles bajo amenazas de muerte.

La Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la comisaría provincial de Ourense recabó información para el inicio de su investigación y concluyó con la atribución del delito de extorsión a dos hombres que mediante intimidación, amenazas y agresiones físicas cobraban una supuesta deuda a esta persona. El hombre temía por su integridad física al estar impedido en una silla de ruedas, así como la de sus familiares.

Finalmente detuvieron a dos hermanos, de 40 y 33 años y naturales de Rumanía, y los pusieron a disposición judicial. El juez lo dejó en libertad con cargos.