Ecologistas en Acción remitió escritos a las consellerías de Economía y Medio Ambiente, así como a la Valedora do Pobo para reclamar la caducidad de la mina de A Gudiña. 

La organización critica que “las administraciones permitieron la vigencia de una concesión de explotación minera de estaño y wolframio, a la que se le otorgó la declaración de impacto ambiental favorable en 2014 y la autorización minera en 2015, pero nunca tuvo actividad”. 

Explican que la legislación establece que las concesiones mineras caducarán de no iniciarse los trabajos y las declaraciones de impacto ambiental pierden su vigencia a los 4 años, denuncian que “no solo no inició los trámites de caducidad sino que intentó ocultar la falta de actividad mediante informes”.

Además, exponen, “afecta directamente al LIC Pena Maseira, dentro de la Red Natura 2000, a apenas un kilómetro de distancia del Parque Natural de Montesinhos”. Piden que se respeten los espacios ambientales sensibles.