El perdón solicitado en sala por la acusada en un proceso penal por injurias y calumnias zanjó el caso con una sentencia absolutoria. La denuncia fue interpuesta por un agente de policía que realizaba tareas de vigilancia en el edificio judicial de Ourense en marzo de 2019. Señalaba que una funcionaria se dirigió a él “de forma airada” diciendo “tú me vigilas, tú me estás acosando”.

La Fiscalía solicitó el sobreseimiento pero el agente mantuvo la denuncia como acusación particular solicitando penas de multa y 3.000 euros de indemnización por daños morales. El juicio se señaló para este miércoles y la defensa expresó la falta de intención de agravio por parte de la acusada. Ella misma pidió perdón manifestando que “nunca tuvo intención de causar perjuicio, ni en lo personal ni en lo profesional”. El agente aceptó el perdón y el letrado retiró la acción penal, reservándose la vía civil.