La villa de Celanova recibió este Viernes Santo la visita del líder de opositor venezolano Leopoldo López, en el marco de su gira por Galicia, invitado por la presidenta de la Asociación cultural Cantaclaro, Daisy Ramírez, quien apunta que “quedó emocionado por el recibimiento, la organización en poco tiempo, y la variedad del origen de los asistentes, de varios estados de Venezuela”. Su visita a Galicia le supuso una sanción el día 30 por incumplir las nornas sanitarias.

En un conocido café de la villa se celebró un acto, de una hora, al que acudió el alcalde, Antonio Puga, la edil de Iniciativas Comunitarias, Teresa Barge, así como algunos compatriotas, solo 25 de 800 que viven en Celanova, debido al aforo limitado por la pandemia. Ramírez apunta que “habló directamente con cada grupo familiar invitado, desde personas recién llegadas a otras ya radicadas de años”, así como con emprendedores venezolanos, y “prometió volver”.

El paso de López por Galicia fue accidentado, pues el 30 de marzo fue propuesto para una sanción por la Policía Local de Cambados (Pontevedra) por haberse saltado presuntamente el cierre perimetral vigente. Llegó desde Madrid, en donde tiene fijada su residencia desde que en octubre salió de la cárcel por su labor de oposición al gobierno de Nicolás Maduro. Y aunque presentó una serie de documentos que justificarían su presencia en Galicia, la Policía instruyó la propuesta de sanción. Precisamente, desde el BNG en Celanova critican este incumplimiento.