Tres robos a punta de navaja en una hora y un teléfono móvil como único botín. La Policía Nacional detuvo ayer en Ourense a dos hombres como presuntos autores de tres delitos de robo con violencia e intimidación que, en dos casos, se quedaron en tentativas.

El primero ocurrió a las 12.05 y la víctima es un taxista que acababa de finalizar un servicio en Santa Teresita. El cliente no solo se negó a pagar sino que, de forma sorpresiva, sacó una navaja de grandes dimensiones y exigió la recaudación. El taxista pudo salir aunque sin tiempo a poner el freno de mano por lo que el coche colisionó con otro estacionado mientras el autor se daba a la fuga.

La policía llegó enseguida y cuando el taxista aportaba los datos entró el segundo aviso. En este caso, una joven denunciaba que dos individuos habían intentado robarle el móvil y la descripción de uno de ellos coincidía con la del cliente del taxi. Habían pasado 5 minutos y sucedía a 150 metros. En marcha ya el dispositivo de búsqueda, a las 13.00 horas se produjo la tercera llamada. Esta vez la encargada de una farmacia intimidada con arma blanca por un hombre cuyas características también coinciden, a la que robaron el móvil.

A las 13.20 fueron localizados y detenidos en la calle Pimentel. Llevaban el teléfono sustraído y la navaja. Hoy pasan a disposición judicial.