José Luis Jiménez, presidente del colegio médico. | // IÑAKI OSORIO

La curva del COVID-19 en Ourense crece desenfrenada y los médicos avisan: “El aumento exponencial de los contagios está llevando al límite de sus posibilidades al sistema sanitario”. Antes de que la situación asistencial sea insostenible, advierte el colegio profesional, “debemos exigir a los responsables políticos y a la ciudadanía ourensana, medidas muy contundentes”.

Su propuesta es un confinamiento domiciliario similar al que se realizó en marzo, con una duración de 20 a 30 días pero no tan estricto como aquel, sino que permita la actividad escolar, el deporte individual y los paseos al aire libre de los convivientes. “Sería la medida más rápida y segura para minimizar al máximo los ingresos hospitalarios y las muertes”, señalan.

Es la petición que han lanzado los médicos cuando la progresión de los contagios parece imparable. El área sanitaria alcanzó ayer los 2.413 casos activos, casi el doble de los registrados durante el pico máximo de la primera ola, que se alcanzó el 28 de abril. Por aquel entonces había 1.325 pacientes de coronavirus pero la curva iniciaba ya el descenso. En cambio ahora todavía se prevén jornadas muy duras de ascenso. Ayer había 129 pacientes ingresados en los hospitales ourensanos, diez de ellos en la UCI, y se registró el fallecimiento de un hombre de 84 años en el CHUO. Son ya 328 muertes en la pandemia.

El colegio de médicos alerta de la sobrecarga asistencia en los centros de salud y hospitales por el rápido ascenso de los casos y piden medidas más drásticas ya. “Hemos ido detrás del virus toda la pandemia”, señala José Luis Jiménez, presidente del colectivo profesional. Las cifras que cada día rompen techo en Ourense ratifican las peores previsiones de los médicos que ya alertaron antes de la campaña navideña del riesgo que suponía celebrar estas fiestas y recomendaban unas navidades solo de convivientes. “Ni las autoridades ni los ciudadanos nos hicieron caso”, señalan.

“Había que tomar una serie de medidas que la gente no tomó y tampoco las autoridades. El concepto ‘salvar la Navidad’ fue un concepto muy malo desde el punto de vista del mensaje. Y se generaron determinadas decisiones que no tenían ninguna base. Hablo de test que se hicieron antes de juntarse y que dieron una falsa idea de tranquilidad. Conviviente es la palabra clave”, recalca Jiménez.

Con o sin confinamiento, insiste el colegio profesional, “es necesario restringir la actividad fuera de casa a lo verdaderamente esencial, y prohibir las reuniones y encuentros entre no convivientes, sobre todo en espacios cerrados, incluyendo domicilios”.

El colectivo es partidario no solo de prohibir, “sino también -con los cambios legislativos que sean necesarios- hacer cumplir la prohibición por las fuerzas de seguridad con las consecuencias penales que sea menester aplicar a los incumplidores”.

José Luis Jiménez explica que son conscientes de que, a la hora de adoptar medidas, las autoridades “tienen que valorar muchas más cosas, el daño económico y social, pero creemos que en este momento deberían anteponerse la salud y las vidas”. Es el momento, apunta, “en que todos debemos poner de nuestra parte y eso significa quedarse en casa todo el tiempo que sea posible, reunirse solo con convivientes y no recibir a nadie si no es necesario”.

Cribado en Ribadavia: 476 test, cero positivos

Ribadavia, bajó ayer la cifra de casos activos de 50 a 53, coincidiendo con la realización de un cribado selectivo con test de antígenos entre la población al que fueron convocados 750 vecinos. La cita los reunió en el antiguo colegio Alameda, donde el personal sanitario tomó la muestra de los participantes, que minutos después fueron conociendo los resultados. Participaron 476 vecinos, el 63,5% de los llamados y ninguno de ellos dio positivo. El cribado generó cierta tensión política en la villa al denunciar el PSOE la presencia del alcalde, César Fernández, en la puerta “pasando revista” con el listado de participantes “que solo puede estar en manos del personal sanitario”. Por tal motivo, anuncian que consultarán a la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) si se vulneró la normativa. Los equipos se instalarán hoy y mañana en Expourense para realizar un cribado masivo en la ciudad de Ourense, que sigue aumentando los contagios de manera relevante. Ayer alcanzó los 764, 47 más que la jornada anterior. Están convocados 8.000 vecinos en horario de mañana (desde las 8.30 horas) y tarde durante todo el fin de semana. Está previsto que se realicen 4.000 PCR y 4.000 test de antígenos.