G.A.C., mayor de edad y sin antecedentes penales, aceptó un año de prisión por un delito de lesiones. Los hechos ocurrieron el 4 de diciembre de 2018 cuando el, ahora, condenado se encontraba en el Bar Ricard y con ánimo de menoscabar la integridad física de un cliente le propinó un golpe en la cara provocando su caída al suelo. Tras la agresión, el afectado sufrió heridas en una parte de la cara que requirieron para su sanación además de una primera asistencia facultativa y de 16 días, 2 de ellos impeditivos.

A la pena impuesta, hay que sumarle la responsabilidad civil derivada del delito por los gastos ocasionados y las secuelas del golpe que ascienden a un importe de 1.200 euros.