Un hombre sexagenario de nacionalidad portuguesa falleció el domingo, cerca de la medianoche, tras ser atropellado por un vehículo en el municipio de Verín, en el kilómetro 10,2 de la carretera nacional N-532, que conecta este concello ourensano con la frontera de Portugal. Se trata de la sexta víctima mortal en carretera de lo que va de año en la provincia. Es el mismo número de fallecidos en siniestros de tráfico que el de hace justo un año, a pesar de que la circulación se desplomó en todas las vías durante los meses de confinamiento, con restricciones a la movilidad.
En la semanas de mayor parón por la pandemia, llegó a bajar hasta un 95% el tránsito de vehículos, según informaba la Guardia Civil de Tráfico el pasado junio. Pero en estos siete meses del año, la siniestralidad mortal no ha disminuido. En todo 2019 fallecieron 8 personas en accidentes registrados en vías interurbanas -no se incluyen aquellos sucesos de circulación registrados en poblaciones-, 15 durante 2018 así como 7 en 2015 y 2017, los dos años menos desfavorables en materia de siniestralidad mortal desde que existen registros. En lo que va de año ha fallecido no solo el mismo número de personas que a estas alturas de 2019, un total de 6, sino que la tipología de estos siniestros también es la misma: 5 en carretera y 1 en casco urbano.
El siniestro fatal de Verín se registró a las 23.40 horas de la noche del domingo. Tras una llamada de alerta, la central de emergencias del 112 comunicó a la Guardia Civil de Tráfico que se había producido el atropello a un peatón a la altura del kilómetro 10,2 de la N-532, en la zona de los clubs de alterne.
Cruzó por lugar no habilitado
Según la información oficial del instituto armado, el sexagenario no hacía uso de prendas reflectantes y además cruzaba la calzada por un lugar no habilitado. La hipótesis de investigación es que el conductor de un vehículo que circulaba a esa hora no pudo reaccionar a tiempo al no distinguir a un peatón cruzando en mitad de la noche.
Movilizados al lugar del suceso profesionales sanitarios, no pudieron hacer nada por la vida del sexagenario. En el lugar del siniestro se certificó su defunción. El fallecido era un vecino de Rebordeda, municipio de Vinhais, en Portugal. Tráfico hizo gestiones con el puesto de Rebordelo -distrito de Braganza- de la Guardia Nacional Republicana (GNR), en el país vecinos. Las autoridades comunicaron la triste noticia a la familia.
